El retorno. Es una de las recetas que maneja la Xunta para frenar el declive demográfico que arrastra Galicia desde hace tres décadas. El secretario xeral da Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, ve en la vuelta de los emigrantes y sus descendientes una "oportunidad" para que España, y la comunidad gallega en particular, "supere el complejo reto demográfico al que se enfrenta". En su intervención en el pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, que se clausuró ayer por la tarde en Madrid, Rodríguez Miranda apeló a la "implicación" del Gobierno de Sánchez con nuevas políticas.

Ante la secretaria de Estado de Migraciones, urgió "políticas orientadas a facilitar el regreso", con "medidas que aborden la cuestión desde todos los ejes", como lo hizo -apuntó- la Extratexia Retorna 2020, aprobada en abril por el Gobierno gallego. Entre las "revisiones necesarias", Miranda puso sobre la mesa una vieja demanda del Parlamento gallego: la reforma del sistema electoral para los emigrantes con la eliminación del voto rogado.

"La postura de Galicia está clara; la ha manifestado explícitamente el propio presidente de la Xunta dentro y fuera de la comunidad y es el mandato manifestado por el Parlamento", sentenció al tiempo que apeló al Gobierno a "buscar una solución" para los pensionistas que llevan casi tres años sin percibir su pensión del Gobierno venezolano. Miranda reclamó al Ejecutivo socialista que "flexibilice el acceso a las pensiones no contributivas, teniendo en cuenta los ingresos realmente recibidos y no el derecho a una pensión que no se hace efectiva".