El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, protagoniza hoy con el líder del PP, Pablo Casado, el arranque del nuevo curso político, que en Galicia estará marcado por la inminente remodelación de la Xunta, con la salida de Beatriz Mato y José Manuel Rey Varela para pugnar por las alcaldías de A Coruña y Ferrol, respectivamente.

El PP gallego prevé proclamar antes del 21 de septiembre a los candidatos municipales, y en esa lista figurarán los conselleiros de Medio Ambiente y Política Social. Feijóo habría aprovechado las vacaciones de verano para madurar los nombres de los relevos de Mato y Rey Varela, y el alcance del reajuste de su Gabinete. Fuentes populares coinciden en que la remodelación será en breve. También hay dirigentes populares que no descartan que el líder del PP gallego aproveche para cambios de calado.

Los populares en Galicia admiten que la moción de censura en España y la renovación de la dirección de Génova "trastocaron sus planes", pues los candidatos a las alcaldías se iban a proclamar antes de las vacaciones. La intención ahora es que la presentación de los cabezas de cartel sea "antes de terminar el verano", lo que sucede el 21 de septiembre, según confirmó ayer el secretario xeral del PP gallego, Miguel Tellado. Fuentes populares dan por hecho que con la proclamación de candidatos habrá también remodelación en la Xunta, y que ésta será por tanto "inminente".

En 2015, el PP gallego anunció el 30 de enero que Elena Muñoz y Jesús Vázquez serían los alcaldes de Vigo y Ourense. Y el 9 de febrero se daban a conocer sus relevos en las carteras de Facenda y Educación. En poco más de una semana, Feijóo resolvió la remodelación del Gobierno. En aquella ocasión los populares retrasaron hasta el inicio del año electoral la proclamación de candidatos, pero fue porque hubo más dudas en la elección de los nombres. Sin embargo, en cuanto tomaron la decisión, se precipitó la crisis de Gobierno.

Dirigentes populares esperan que suceda igual en esta ocasión. Además, la brecha interna que abrió la conselleira y futura candidata a la alcaldía de A Coruña, Beatriz Mato, con su demanda de condonar al puerto de Langosteira evidencia, según fuentes populares, que conviene ya que los candidatos salgan del Gobierno.

A finales de agosto, Mato ofreció una rueda de prensa como presidenta del PP local en la que anunció que pediría en O Hórreo para A Coruña un trato igual que Valencia, después de que el Gobierno de Sánchez condonara 350 millones de un crédito para la ampliación de los muelles del Mediterráneo. En su intervención, Mato no hizo mención a las demandas de días antes de los empresarios de Pontevedra exigiendo al Ejecutivo central compensaciones para todos los puertos gallegos.

El PP gallego reaccionó extendiendo la demanda de la condonación a todos los puertos gallegos con una iniciativa en el Parlamento autonómico.

No todos en el PP gallego apuestan por urgir la reforma de la Xunta. Los propios interesados prefieren seguir utilizando la plataforma que da la Consellería. Les gustaría demorar su salida del Ejecutivo autonómico como mínimo hasta comienzos de año, y así lo habrían dicho. Alegan que siempre tienen más impacto mediático las declaraciones de un conselleiro que las de un candidato a la alcaldía.

En todo caso, la última palabra es de Feijóo. Es quien tiene en sus manos la decisión de apurar o no los ajustes en el Gobierno, y también la de fijar el alcance de esta crisis. ¿Se limitará como en 2015 a cambiar a los dos conselleiros salientes o ampliará la remodelación? Hay quien en el PP gallego baraja que en esta ocasión irá más allá. Otras fuentes apuntan que quizás sea mejor aguardar a los resultados de las municipales.

Feijóo está en el ecuador de su tercer mandato, y los suyos, descartado el salto a Madrid, le animan a intentar la cuarta mayoría absoluta. Los comicios del próximo mes de mayo serán el termómetro de la salud electoral del Partido y pueden ayudarle a tomar la decisión sobre su futuro político. Entonces podría decidir acometer cambios para coger un nuevo impulso y lanzar su cuarta candidatura, o empezar a preparar su retirada.