El sector turístico acumula cifras negativas en la comunidad gallega. No solo los establecimientos hoteleros sufren pérdidas anuales por la caída de visitantes, también los apartamentos turísticos se han visto perjudicados en el balance de 2018, con una caída de reservas de casi el 9% respecto al año anterior. En contraposición están las casas rurales, que el año pasado obtuvieron máximo histórico de ocupación, con un total de 217.735 viajeros, un 0,56% más que los 216.520 de 2017, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La cifra récord supone un crecimiento en viajeros del 68% en el último lustro ya que desde 2013 se mantuvo una tendencia al alza. Entonces, la cifra de turistas alojados en casas rurales era de poco más de 129.000.

Las pernoctaciones en este tipo también de alojamientos también experimentó un crecimiento del 61% en los últimos cinco años. Así, las reservas en casas de turismo rural alcanzaron el año pasado las 416.423. En cuanto a la estancia media de los viajeros en las casas rurales gallegas, en 2018 fue de 1,8 días.

En los apartamentos turísticos la situación es diferente. La comunidad gallega atrajo el año pasado a 130.913 viajeros, lo que supuso una caída del 8,9% con respecto a los 143.773 del ejercicio anterior. Los meses de julio, septiembre y octubre, con 20.688, 15.939 y 9.811 respectivamente, fueron los más perjudicados por la crisis de viajeros que sufrió Galicia. En 2017, con 23.142, 16.942 y 11.876, estos meses registraron unos datos mucho más positivos que lograron repuntar el bienestar de los apartamentos turísticos.

No es el único dato que refleja pérdidas. Las pernoctaciones descendieron un 10,5% al pasar de las 481.011 del año anterior a las 430.041 de 2018. La ocupación se situó en el 45,2% por apartamentos en fin de semana y sus precios representaron una media total de 140,22 euros. La estancia media en estos alojamientos fue de 2,99 días por persona.

A Coruña

Por provincias, A Coruña fue destino de la mayor parte de los viajeros que acudieron a los apartamentos turísticos de Galicia, con un total de 57.488. Pontevedra fue la segunda provincia más visitada, con 39.564 visitantes. Lugo, con 24.852 y Ourense, con 9.013, cierran la lista. En cuanto a las casas rurales, el ranking lo lidera A Coruña con 72.973 viajeros, seguida por Lugo, con 69.629, Pontevedra, con 48.870 y Ourense, que sumó 35.267.

En los hoteles, el turismo gallego cerró el año 2018 con un aumento en la rentabilidad de casi un 3%, pero con un descenso del 7,3% de visitantes respecto al 2017, cuando obtuvo 4,5 millones de turistas, en comparación con los 4.163,998 de 2018.

Uno de los factores determinantes en la caída del turismo en el conjunto del año fue el descenso de las reservas durante los meses de verano. Bajo este escenario, el incremento de alojamientos en las casas rurales gallegas supone un hecho extraordinario para el turismo de la comunidad, marcada por el descenso experimentado en los hoteles y los apartamentos.