Después de que Pedro Sánchez prometiera la semana pasada activar la reforma del modelo de financiación autonómica tan pronto se formara el nuevo gobierno, las autonomías se han lanzado a tomar posiciones para hacer valer sus intereses. En el Levante ya se están moviendo y las comunidades del Noroeste no se han querido quedar atrás. Los empresarios de Galicia, Asturias, León y Cantabria han empezado a dar los primeros pasos para formar un frente abierto a sindicatos y gobiernos autonómicos con el que defender un sistema de financiación "justo" y que recoja sus aspiraciones: una negociación multilateral, que tenga en cuenta el reto demográfico, el envejecimiento y la dispersión de la población de estos territorios.
"Estamos dispuestos a formar a un frente común siempre que sea desde una plataforma abierta a todas las organizaciones empresariales, sindicales y gobiernos autonómicos", expone el presidente de la Confederación de Empresarios de Pontevedra, Jorge Cebreiros.
No necesitan empezar de cero para conformar esta alianza, puesto que ya existe una plataforma, en la que se integran todos los agentes sociales y políticos del Noroeste, que se creó para defender la integración en el Corredor Atlántico y el impulso a las infraestructuras de Galicia, Asturias, León y Cantabria. La idea es repetir este modelo abierto a sindicatos y poderes autonómicos "sea cual sea su signo", con la idea de no limitarla al ámbito empresarial y tener así mucha más capacidad de presión. Hay mucho en juego. El presidente del Gobierno comprometió la reforma de la financiación autonómica tras reunirse con el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, que gobierna coaligado con Compromís, partido al que ronda el PSOE para conseguir su apoyo en la investidura de Sánchez.
Y intereses de las comunidades integradas en el frente del Levante „Murcia, Comunidad Valenciana, Andalucía y Baleares„ son contrapuestos a los que defiende el Noroeste. La Xunta ya advirtió la semana pasada que se opondría a cualquier intento de negociación bilateral.
Y en esa línea van los empresarios de Galicia, Asturias, León y Cantabria. "Vamos a pedir que la financiación autonómica no sea en función exclusivamente de la población sino que tiene que ser en función de los servicios: hay que tener en cuenta orografía, dispersión, extensión, despoblación y los efectos de la descarbonización. Eso lo estamos sufriendo las comunidades del Noroeste y eso tenemos que defenderlo", según indicaron los responsables de los empresarios de Asturias y León.
La Confederación de Empresarios de Galicia reconoce que ya hubo contactos telefónicos, aunque ahora tendrán que reunirse a nivel interno para empezar a dar los primeros pasos. Cebreiros apunta que se necesita "un gobierno estable" que preste atención a los problemas del Noroeste: "demografía, despoblación y falta de infraestructuras".
"Lo que hay que reclamar es que se tengan en cuenta la coherencia y no el egoísmo total de algunos. Se trata de asegurar que todos los ciudadanos tengan los mismos servicios públicos de calidad", defendió el presidente de CEOE-Cepyme de Cantabria, Enrique Conde.
