La crisis sanitaria del coronavirus amenaza las elecciones autonómicas de Galicia del 5 de abril. Su aplazamiento es una cuestión que ya está “sobre la mesa”, según reconoció ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, aunque matizó que las competencias para aplicar esa medida son del Gobierno central y la Junta Electoral Central. Apretar el botón rojo de cancelar la votación dependerá de si se logran frenar los contagios.

La propagación del coronavirus se disparó en varios puntos de España en los dos últimos días, lo que obligó al Gobierno central a aplicar restricciones como prohibir eventos con más de un millar de asistentes en las zonas de riesgo. La Xunta recomienda aplicar esa restricción durante los próximos quince días a partir de hoy, período que incluye las cinco primeras jornadas de la campaña.

Feijóo reconoció el impacto de la crisis sobre el período electoral tras informar del plan de actuación del Ejecutivo gallego en esta cuestión, circunstancia que impone, según expuso, barajar la suspensión de los comicios, algo que le parece “razonable, prudente y aconsejable”. En primer lugar, por el previsible incremento del número de afectados. En segundo, por obstaculizar el acceso de los ciudadanos a los mensajes electorales para votar con garantías.

“Las elecciones tienen que celebrarse con garantías, hay que respetar el derecho al sufragio de todos los electores. Debemos analizarlo y tomar la decisión en función de la evolución de los contagios y de la incidencia”, alegó sobre la suspensión. “Evidentemente, este asunto está en la agenda”, dijo antes de añadir que “hay tiempo, pero están encima de la mesa cuáles son los criterios en relación con la recomendación sobre la suspensión o no de las elecciones”.

Esta decisión carece de precedentes e incluso no se aplicó tras los atentados del 11 de marzo de 2004, tres días antes de unas elecciones generales. En este caso, entra en juego, según su intervención, la salud pública. “Lo importante en este momento no son unas elecciones convocadas, sino que seamos capaces de preservar la salud [de la población]”, esgrimió, si bien se afanó en aclarar que de momento no tiene una posición sobre esta cuestión. “Si observamos que la salud pública puede estar en riesgo, haremos nuestra recomendación al Gobierno central y a la Junta Electoral Central”, terció, señalando los ámbitos con competencia para paralizar unos comicios.

Para Feijóo el proceso electoral debe celebrarse “con normalidad” y “sin limitaciones” no solo para la ciudadanía, sino para la explicaciones de sus programas por parte de los partidos, que deberían tener capacidad para celebrar actos sin limitaciones de aforo. Al menos durante los próximos 15 días no podrá ser así. De hecho, el PP, partido que preside Feijóo, canceló la romería que había programado para el sábado cerca de Santiago y a la que iban a acudir 4.500 personas.

Las estrategias de Gobierno central y Xunta para combatir el coronavirus han forzado a los partidos gallegos a replantearse sus campañas, especialmente la organización de actos multitudinarios, e incluso a analizar la suspensión del 5-A.

El líder del PSdeG, Gonzalo Caballero, lanzó un mensaje de prudencia. “No vamos a caer en alarmismos innecesarios ni exagerados, pero es un tema importante y seremos responsables”, declaró. Pidió a la Xunta “transparencia” sobre las decisiones que afecten a la campaña y a los comicios.

Desde Galicia en Común dudan de la eficacia de restringir la asistencia a eventos públicos a menos de un millar de personas y consideran que “no son democráticas” unas elecciones celebradas tras limitar la campaña, pues “no garantizarían el derecho a recibir una información veraz sobre las propuestas” de cada candidatura. En esa situación, ven “lícito plantearse un aplazamiento”, según fuentes de la coalición.

La líder del BNG, Ana Pontón, pidió a Feijóo que reúna a los principales partidos para abordar la cuestión y que comparezca en el Parlamento para explicar la respuesta de la Xunta ante la crisis.

El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña, comunicó a los líderes de PSdeG, BNG y En Común que les informará periódicamente de la situación.