El sector de la construcción ha sido uno de los pocos que se ha salvado de la crisis que ha provocado el COVID. Por tercer año cerró con un incremento del número de trabajadores. El peso del sector en el PIB gallego alcanzó el 7% en el segundo trimestre del pasado año. Y además, para este ejercicio la Fundación Laboral de la Construcción ha alertado de que la construcción necesitará entre 5.300 y 9.000 trabajadores en Galicia. Sin embargo, esta mejoría de los últimos ejercicios no se traslada a toda la comunidad.

En los últimos años, la demanda del sector dibuja una Galicia a dos velocidades. Según los últimos datos disponibles, en 2019 hubo 143 concellos en los que no se construyó ninguna vivienda. Pero si se tienen en cuenta aquellos en los que solo se edificó una casa o ninguna, el número asciende hasta los 180. Es decir, en el 57% de los ayuntamientos gallegos la construcción está paralizada. Y, además, hay diferencias entre las provincias atlánticas y las del interior, según los datos del Instituto Galego de Estatística.

Con respecto a 2018, aumentaron los municipios en los que no se construyó ninguna vivienda, pero continuó la misma foto fija de anteriores ejercicios: en más de la mitad de los concellos de Lugo y Ourense no hubo obras nuevas, mientras que en las de A Coruña y Pontevedra los municipios que no vieron una grúa rondó el 20%. Es decir, la construcción se recupera en Galicia, pero no lo hace al mismo ritmo en todo el territorio.

En el 76% de los ayuntamientos de Ourense (70) no se levantó ninguna nueva vivienda en 2019, mientras que en los de Lugo el porcentaje alcanzó el 53% (41 municipios). Tanto en A Coruña como en Pontevedra la cifra fue más baja: en la primera alcanzó el 21% (20 concellos) y en la segunda, el 19% (12). En 2018, el porcentaje de ayuntamientos ourensanos que no vieron ninguna grúa fue del 54% y en los de Lugo, del 52%. En cambio, en los de A Coruña alcanzaron el 22% y en los de Pontevedra, el 28%.

De las 2.217 viviendas nuevas que se edificaron en la comunidad durante 2019, casi la mitad (48%) se levantaron en la provincia de A Coruña, mientras que en la de Pontevedra fueron casi un tercio (32%). El 18% restante se lo repartieron Lugo (12%) y Ourense (6%).

Otra cifra que ayuda a entender que la construcción tiene distintas velocidades según las zonas es que solo en diez ayuntamientos, el 2% del total, se edificaron durante 2019 más de 50 viviendas. Cuatro están en Pontevedra, dos en A Coruña, dos en Lugo y otros dos en Ourense. La clasificación está liderada por seis de las siete ciudades: A Coruña, Santiago, Pontevedra, Vigo, Lugo y Ourense. Solo se queda fuera Ferrol con 44. Pero entre las diez primeras se cuelan varios municipios de los alrededores de las ciudades que se convierten en alternativa residencial para evitar el encarecimiento de la vivienda. Es el caso de Oleiros (156 edificaciones) en A Coruña o de Nigrán (55) en Vigo.

A la espera de los datos del cierre de 2020, todos los informes preliminares apuntan a una recuperación de la construcción de viviendas pese a la pandemia. Sin desglosar por municipios, el avance de los números de la construcción durante el pasado año permite aventurar otro ejercicio de recuperación en el sector. Entre enero y octubre de 2020, se construyeron un tercio más de viviendas que en el mismo periodo del año anterior, pese al estado de alarma y el parón de la economía: 2.392 frente a 1.794. Y eso que el pasado mes de abril solo se construyeron 68 nuevas viviendas de nueva planta.

La rentabilidad por alquilar supera el 5%

Comprar para alquilar es cada año más rentable en Galicia. La rentabilidad de la vivienda en la comunidad se sitúo en 2020 en un 5,2%, un 0,1 más que el año anterior, según el estudio La rentabilidad de la vivienda en España en 2020, basado en el análisis de los precios de la vivienda en venta y alquiler de diciembre de 2020 por el portal inmobiliario Fotocasa. Pese a que el porcentaje gallego es el segundo más bajo de España, tras Baleares, es la cifra más alta desde 2006, año del que data el primer estudio. A nivel nacional, la rentabilidad de la vivienda fue de un 6,8%, un 0,2 más que en el año 2019 y un 1,5 más que hace cinco años. No existe en la actualidad ningún producto financiero —que no tenga un elevado riesgo— que ofrezca una rentabilidad similar. Ninguno se acerca. Por ejemplo, el interés de la última subasta de letras del Tesoro Público fue negativo (-0,307%) y las últimas obligaciones a 10 años ofrecían un cupón del 0,10%. Y según los últimos datos del Banco de España, el tipo de interés medio de los depósitos a plazo que ofrecen los bancos fue del 0,10%.

El parque de casas sigue al alza

El parque de viviendas en la comunidad gallega durante 2019 creció en 2.354, un 3% menos que el ejercicio anterior, cuando se había incrementado un 55% hasta las 2.427. Esas casi 2.500 viviendas eran la cifra más alta desde 2011, aunque muy lejos aún del récord de 2007, cuando se rozaron las 45.400. En Galicia se levantaron 1.714 edificios de nueva planta en 2019, de los que la mayoría, 1.148, tienen un uso residencial. De ellos salieron 2.217 viviendas a estrenar en Galicia. Se rehabilitaron otras 430, mientras que las demoliciones alcanzaron las 293, según los últimos datos del Instituto Galego de Estatística (IGE). Algo más del 10% de las viviendas nuevas de la comunidad gallega que se levantaron en 2019 lo hicieron en la ciudad de A Coruña (272), seguida de Santiago (206). El tercer concello con mayor número de viviendas nuevas fue Oleiros con 156, seguida de O Vicedo con 131. Pontevedra y Vigo cerraron la clasificación con más de un centenar de nuevas casas, con 102 y 101, respectivamente. De los 18 concellos que pasaron de la veintena de nuevas viviendas construidas durante 2019, ocho pertenecían a la provincia de Pontevedra; siete a la de A Coruña, dos a la de Lugo y uno a la de Ourense.