Repsol reclama a la Autoridad Portuaria de A Coruña que elabore "algún tipo de estudio" que garantice que el enlace ferroviario de Langosteira no afectará al poliducto que pretende construir entre la refinería de Bens y las nuevas instalaciones para la descarga de crudo que construirá en la dársena exterior, según recoge el proyecto que tramita la petrolera ante la Consellería Economía, Emprego e Industria. Repsol también ha decidido alejar unos metros el trazado de su infraestructura a la altura de Suevos, en Arteixo, para intentar reducir cualquier riesgo de afección.
La Xunta hizo ayer públicas varias modificaciones del proyecto que promueve la compañía energética. La empresa señala en el documento que "con el tren en funcionamiento se desconoce si habrá vibraciones sobre el poliducto" y que el Puerto, promotor de la construcción del acceso ferroviario, deberá realizar "algún tipo de estudio" que garantice que no habrá repercusiones sobre la infraestructura para transportar petróleo.
El enlace ferroviario del puerto de Langosteira será el principal inconveniente al que se enfrentará el poliducto. La primera infraestructura está previsto que llegue mucho después que la instalación de Repsol. El proyecto de la multinacional explica que el poliducto estará a "unos 25 metros de distancia" del trazado ferroviario "en la zona más cercana" y considera que este espacio es muy próximo "a efectos de vibraciones ocasionadas" por las voladuras que se realicen para construir el tren a Langosteira, que en la mayor parte del recorrido irá en túnel. Repsol exige que la empresa que construya el enlace ferroviario "deberá hacer un estudio" de vibraciones con "sismógrafos".
La declaración de impacto ambiental de la conexión ferroviaria de Langosteira ya advirtió de que Repsol y el Puerto deberán "buscar la mejor solución para ajustar ambos trazados", así como para "coordinarse" durante el desarrollo de las obras. La futura conexión ferroviaria partirá de Pocomaco, donde enlazará con el ramal A Coruña-Santiago, y llegará al puerto exterior a través de Pastoriza y Suevos.
Repsol ha introducido varios cambios en el proyecto del poliducto -que discurrirá 1.300 metros por A Coruña y 2.500 por Arteixo-. El plan ahora tiene en cuenta la posible construcción del enlace de Suevos (conexión con la autovía de Langosteira) e incorpora la previsión de que el Ayuntamiento construya los colectores de agua y saneamiento que darán servicio al puerto exterior y al polígono de Sabón. La propuesta incluye también los desvíos de tráfico que se deberán realizar durante la ejecución de los trabajos. La nueva zona de descarga y el poliducto costarán 27 millones de euros.
