Un error en la notificación de la comparecencia de un testigo perito obligó a aplazar hasta el 23 de abril el final del juicio que se celebró ayer en el Juzgado de lo Social Número 2 de Refuerzo, donde la familia del menor de Oleiros Fran Amor demanda a la Xunta para conseguir que le reconozca mayor grado de discapacidad a este joven que nació sin iris en los ojos, además de que incluyan en sus informes el diagnóstico de aniridia bilateral congénita. En la sesión declaró el oftalmólogo del joven y la técnica de la Xunta que hizo la valoración de la discapacidad y que se reafirmó en su resolución porque no existe un código para esta enfermedad rara.