Naturgy, antigua Gas Natural Fenosa, ha remitido al Gobierno central el proyecto para desmantelar la central térmica de Meirama tras casi 40 años en funcionamiento. El coste de los trabajos, que estarán divididos en tres fases diferentes, ascenderá a 13,7 millones de euros. El cierre está previsto para finales de este año, pero la empresa ya tiene en tramitación gran parte de la documentación que necesita, entre la que se encuentra la evaluación ambiental del desmantelamiento del grupo 1 de las instalaciones, que están ubicadas en Cerceda.
La operación para cerrar la central empezará con los trabajos previos, en los que se realizará la limpieza de equipos, la retirada de materiales con amianto, el desmantelamiento de la red de acometidas, la instalación de medidas de seguridad para el desarrollo de las obras y la colocación de sistemas de retirada de residuos, según recoge la propuesta de la empresa.
La siguiente fase consistirá en la retirada de las instalaciones auxiliares, el almacenamiento y transporte de combustibles, las instalaciones de producción, la red de tratamiento de agua y la zona de carbón. El proyecto señala que los elementos de mayores dimensiones serán desmantelados en "último lugar". "La demolición se podrá realizar por medios mecánicos con accesorios", indica el documento. La última fase consistirá en la adecuación de la parcela.
Los trabajos incluyen el desmontaje, entre otras instalaciones del recinto, de la torre de refrigeración, la chimenea, la caldera, la turbina, los transformadores y los edificios de tolvas y molinos de hulla. La empresa también demolerá todas las instalaciones auxiliares (oficinas, almacenes, comedor, aparcamiento, controles de acceso y naves).
La central es una instalación de generación eléctrica que empezó a funcionar en 1980, con una potencia máxima acreditada de 580 megavatios brutos. Esta instalación se nutría de lignito pardo procedente de una explotación próxima a la instalación. Debido a las modificaciones realizadas entre 2008 y 2009 para adaptarse a la normativa ambiental para grandes instalación de combustión, la centra utiliza carbón de importación, según señala la empresa.
Su icónica chimenea tiene 200 metros de altura y un diámetro de 18 metros en la base y 11 en la boca.
Empleos en la central
En la central de Meirama trabaja un centenar de profesionales en plantilla, más otros tantos en empresas auxiliares que dependen de la planta, sin contar los trabajos indirectos que genera.
Entre las opciones que baraja la compañía energética es que parte de la plantilla se quede momentáneamente realizando labores de desmantelamiento en la central, y el resto sea recolocada en otros centros de trabajo de Naturgy.
