El Concello de Cambre denunciará ante Fiscalía a los responsables del Pazo de Brexo por la celebración de banquetes y bodas sin licencia. La denuncia llega después de que el Ayuntamiento desestimase a principios de julio las alegaciones de la empresa y mantuviese la orden de cierre alegando que el expediente de licencia de actividad todavía no había sido resuelto.

El Gobierno local no tuvo en cuenta las reclamaciones de los gestores del recinto, que apelaron a los perjuicios que les acarrearía el cierre. En su respuesta, el Concello sostiene que la suspensión de la actividad no solo es una medida desproporcionada, como alega la firma, sino que están obligados por "imperativo legal".

El Ejecutivo municipal informó ayer de la próxima interposición de una denuncia tras alertar la Asociación profesional de los Autónomos, Emprendedores y Empresarios de Galicia (Ascega) que el pazo "continúa con su actividad ilegal de celebración de banquetes y bodas". "Este mismo fin de semana tuvo lugar en el recinto una ceremonia nupcial con más de cien invitados", denunció ayer el colectivo, que acusa a los gestores de "hacer oídos sordos" al escrito remitido por el Concello para ordenar el cese inmediato de la actividad.

Ascega considera que el Concello y la empresa actúan de una forma irresponsable y denuncia que "los principales damnificados de toda esta situación son los novios y los invitados a estos eventos, que carecen de cualquier cobertura ante un siniestro". La empresa que gestiona las instalaciones declinó ayer hacer declaraciones a este medio.

El Concello de Cambre replicó ayer que no tiene constancia de ningún incumplimiento de la orden de suspensión de actividad. "En caso de haberlo tenido, se habrían tomado las medidas adicionales pertinentes. Precisamente, los incumplimientos por parte del pazo de Brexo de los que este Concello tuvo constancia fueron los que dieron pie a la medida cautelar de suministro de agua", añaden desde el Consistorio en un comunicado remitido a los medios.

Antecedentes

El Ayuntamiento abrió expediente de disciplina urbanística a este pazo el pasado 12 de abril y ordenó la suspensión el cese de la actividad por carecer de licencia. La empresa alegó sin éxito que estaba en trámite de regularizar la actividad y que la suspensión ordenada le causaría graves perjuicios y era "desproporcionada". Ascega presentó un escrito el 31 de mayo en el que denunciaba que se seguían celebrando bodas y banquetes en el pazo y en el que exigía la adopción de medidas cautelares adicionales, la intensificación de la vigilancia y que se denunciase ante la Fiscalía.