La construcción del poliducto que conectará el puerto exterior de Langosteira con la refinería de Repsol dejará 859.000 euros en las arcas del Concello de Arteixo por el impuesto de obras, según asegura el Gobierno local. Este es el último paso antes de que la empresa pueda comenzar los trabajos en territorio arteixán, en los que están incluidas las instalaciones auxiliares en la explanada portuaria. La empresa ahora debe obtener la licencia en A Coruña, ya que una parte del trazado de la infraestructura discurre por ese municipio.

Fuentes de la multinacional energética señalan que la consecución del permiso municipal en Arteixo está "en los últimos pasos de la tramitación" y que en breve estará lista. También asegura que en A Coruña la autorización se encuentra "en tramitación".

El Gobierno local arteixán explica que ha establecido que Repsol debe abonar 859.000 euros en concepto del impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO) y que ahora lo único que falta es que la compañía abone esta cantidad para poder conceder la licencia. El Ejecutivo también destaca que este trámite se realiza de forma rápida, entre un día o dos.

La documentación que Repsol presentó al Ejecutivo local recoge que el coste de la obra dentro del término municipal de Arteixo será de 18,9 millones. El poliducto contará con 11 tuberías, de los cuales dos estarán destinadas al transporte de crudo. Las restantes servirán para otros combustibles, aunque no se utilizarán inicialmente. La infraestructura proyectada por Repsol contará con un sistema de detección de fugas e intrusismo, según recogía la documentación técnica.

Esta infraestructura discurrirá 2.500 metros por Arteixo. El poliducto partirá de Langosteira y bordeará por el sur el núcleo rural del puerto de Suevos. Después bajará hacia el entorno del campo de fútbol. A continuación irá en paralelo a la autovía de acceso a la dársena hasta entrar en el término municipal de A Coruña. La estructura llegará a la refinería por las proximidades del núcleo de Nostián.

Esta construcción, con un plazo estimado de un año de ejecución, sería la última que acometerá la empresa petrolera para el traslado desde los muelles interiores de la ciudad hacia el puerto exterior, ya que ya tiene en marcha la edificación del pantalán en Langosteira donde atracará los petroleros para descargar.

La compañía energética no incluyó dentro de su solicitud de licencia de obras municipal la construcción del pantalán (no sujeto a licencia municipal, según confirmaron el Concello de Arteixo y Repsol).

La empresa solicitó las licencias de obras en los dos ayuntamientos en mayo de 2018. Desde entonces espera a que termine este trámite administrativo. Previamente, tuvo que obtener el visto bueno de la Consellería de Medio Ambiente para el proyecto. Repsol había remitido su propuesta en 2015 a la Xunta.

La Autoridad Portuaria de A Coruña demoró hasta el año 2021 el inicio de las actividades de la empresa en punta Langosteira, que el convenio firmado en octubre de 2013 fijaba para abril del año pasado, por lo que ya acumulan casi un año de retraso.