El colegio de Infantil y Primaria Valle Inclán de Perillo en Oleiros iba a celebrar este curso 2020-2021 que al fin, tras muchos años, tendría un comedor escolar decente y no los módulos o "chabolos" como los denominó ayer el alcalde. Pero el coronavirus ha obligado a recuperar estas viejas y precarias instalaciones, por lo que seguirán en uso al menos un año más. Ser una Asociación de Nais e Pais de Alumnos (ANPA) en este curso será más difícil y complicado que nunca.

El ANPA del Valle Inclán, para cumplir con el protocolo de seguridad de la Covid-19, decidió mantener este curso los servicios de madrugadores y comedor, pero para poder atender todas las solicitudes y que los niños puedan comer respetando las distancias de seguridad, han tenido que echar mano de los viejos galpones, aunque la Xunta terminó este verano la segunda fase del comedor escolar, integrado en el edificio educativo. También tienen que realizar dos turnos de comedor ajustando mucho los tiempos, de hecho prevén el uso de las aulas para que los niños esperen en ellas antes y después de comer, siempre con las normas de higiene para entrar y salir.

El alcalde, Ángel García Seoane, criticó ayer que se mantengan los "chabolos" después de tanta "lucha" para erradicarlos pero la Consellería de Educación recordó que las ANPA están siguiendo los protocolos de seguridad, en los que les dan alternativas como instalar mamparas, hacer turnos o utilizar espacios vacíos, por ejemplo. El ANPA del Valle también decidió mantener las actividades extraescolares pero elimina todas las que son de contacto, como el fútbol, el baloncesto y el judo, además de las que no tienen garantía de higienización, como informática. A cambio ofertará este curso una hora diaria de actividades, de cuatro a cinco de la tarde, con posibilidad de ampliar una hora más, y con grupos de entre diez y doce alumnos como máximo.

Cierre de la oficina del ANPA

Los padres además no podrán acceder al interior del colegio, por lo que la oficina del ANPA permanecerá cerrada al público y la atención preferente será vía correo electrónico, además del número de teléfono habitual para urgencias.

El ANPA de Perillo ha destacado que todas estas adaptaciones supondrán un esfuerzo y adaptación por parte de toda la comunidad escolar por lo que han pedido "comprensión y paciencia". Aún quedan aspectos de los protocolos de seguridad además que no están definitivamente acordados y podrá haber modificaciones, como por ejemplo la previsible necesitad de contratar a otro monitor más para el comedor.