Una tradición tan asentada durante años como el Entroido que organiza el Ayuntamiento de Oleiros y sobre todo con la actuación del propio alcalde que siempre se ha disfrazado, ha resistido todo tipo de temporales y crisis, pero la pandemia ha podido con esta cita festiva.

“Este año no habrá Entroido, no se puede hacer por la situación actual”, declaró Ángel García Seoane. En pleno Carnaval de 2020 se empezaba a hablar del coronavirus e incluso se veían disfraces pero luego llegó el confinamiento que demostró la gravedad de lo que estaba empezando a suceder y desde entonces ha empeorado gravemente y ha obligado a suspender todo tipo de actos de presencia masiva y congregación de personas, como puede ser este evento, una cita que al final celebra la vida, la alegría y la capacidad de reírse de uno mismo.

El concurso, desfile, chocolate para los mayores y la jornada de disfraces en el polideportivo de A Rabadeira queda así anulado por el COVID.