Los trámites para instalar seis parques eólicos en el entorno de Monte do Gato avanzan y crece la inquietud vecinal. Bajo el lema Energías renovables, sí; macroeólicos en las aldeas, no, residentes en los municipios de Aranga, Coirós y Oza-Cesuras recogen firmas para exigir que se suspendan los trámites de los proyectos Felga, Seselle, Feás, Gato, Penas Boas y Fontella y se informe debidamente a la ciudadanía sobre el impacto global de los 40 molinos de viento, las subestaciones y líneas de alta tensión proyectadas en este entorno rural.
“Aquí nadie nos informa de nada”, se queja Azucena Guerreiro, una ganadera que denuncia que su explotación quedará cercada por infraestructuras y atravesada por una línea de alta tensión: “Hipotecan todas mis propiedades”, lamenta. Esta vecina de Aranga, la secretaria del monte vecinal de As Fervenzas, Esperanza González, y la bióloga Mónica Fernández-Aceytuno, que ya presentó alegaciones a uno de los parques por el impacto ambiental, paisajístico y en el patrimonio cultural, mantuvieron esta semana una reunión con el alcalde de Aranga Alberto Platas para instarle a requerir los informes sobre el impacto de estas infraestructuras y ofrecer asesoramiento técnico a los afectados para que no se vulneren sus derechos. Se trata de la primera de una serie de reuniones que prevén mantener con los alcaldes de los ayuntamientos afectados.
Relatan que hace unas semanas el regidor les dijo que desconocía los planes de desarrollo eólico en la zona y denuncian que ha pasado ya el plazo al trámite de evaluación ambiental de varios de los proyectos. “Se nos está pasando los plazos de todo, nosotros no tenemos medios ni conocimientos técnicos para defendernos y los concellos no han convocado asambleas ni reuniones informativas”, critica Azucena Guerreiro. En la misma línea, la secretaria del monte comunal, Aranza González, incide en el hecho de que los parques se tramitan de forma fragmentada por dos compañías, Greenalia y Galenergy, y que en ningún momento se les informó del impacto global: “Firmamos por nueve molinos y una línea subterránea y ahora resulta que son 40 molinos, dos subestaciones y y dos líneas de alta tensión”, critica.
Los afectados comienzan poco a poco a movilizarse con la ayuda de la plataforma Salvemos a comarca de Ordes y han convocado a los vecinos de diferentes localidades afectadas para intentar crear un frente común. Los grupos de la oposición de los municipios de Oza-Cesuras, Aranga y Coirós también instan medidas. El PSOE de Oza-Cesuras presentó una moción que prosperó con la abstención del PP para instar a asesorar a los afectados en el trámite de alegaciones e informar del impacto. Los socialistas de Aranga también han registrado ya una moción en la que alertan del impacto de los parques, instan a poner a disposición de los afectados toda la información y a articular fórmulas de participación para que se garanticen los derechos de los afectados. El BNG alegó contra todos los parques, prepara mociones y elevará el caso al Parlamento.
