El Ministerio de Medio Ambiente formuló en 2017 una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del dragado de los sedimentos de la ría de O Burgo. Si a los cuatro años de una DIA no están ejecutadas las obras, es necesaria una nueva evaluación ambiental, por lo que Demarcación de Costas en Galicia solicitó el pasado febrero una prórroga al Ministerio de Medio Ambiente y éste, el pasado abril, redactó la memoria justificativa para dicha solicitud de prórroga y acaba de hacerla pública. La conclusión es que toda la zona donde se actuará está prácticamente en la misma situación que hace cuatro años, “sin cambios sustanciales”, por lo que no se ejecutarán “modificaciones” en las medidas preventivas, correctoras y compensatorias. Por eso resolvieron que esta declaración de impacto prorrogue su vigencia “dos años más”, hasta 2023. No obstante en este informe se ofrecen algunos detalles más que afectan a Culleredo, como el uso de la laguna de O Burgo.

Medio Ambiente dice que no serán “significativos” los impactos sobre la dinámica de la ría de O Burgo y su morfología costera, dunas, fauna y vegetación, salvo sobre la pradera marina (Zostera noltii) que será trasplantada. Respecto a la DIA inicial ahora plantean la instalación de pantallas acústicas provisionales.

El material dragado no se verterá directamente en los recintos de confinamiento (el de Oleiros en O Seixo y el de Culleredo en la desembocadura del rego da Trabe). Primero se meterá en unos tubos apoyados en el lecho marino, para decantar los fangos y consolidarlos añadiéndole un producto hasta secarlos, y después se trasladarán a los recintos. Estos geotubos de confinamiento estarán depositados en la laguna de O Burgo. Habrá un bombeo provisional del efluente del recinto de confinamiento de Oleiros y de Culleredo, hacia la laguna de O Burgo. Será conducido por una tubería a lo largo del paseo cullerdense, mientras que desde Oleiros irá a través de un tubo flotante sobre la ría.

En esta actualización de la DIA se indica que se dragará “evitando las zonas próximas a las aves” en invierno y se instalarán posaderos para ellas, además de realizar un “seguimiento” para ver si resultan afectadas. Se realizará un control arqueológico discontinuo de la ría salvo en cuatro casos en que será continuo: el área del yacimiento arqueológico de Ponte Pasaxe, el puerto de O Burgo y ya en Oleiros, el posible pecio de Drake y el Torreón de Bescansa.

Se dice que se instalará “de forma temporal” una tubería de impulsión” desde el recinto de confinamiento a la laguna, que ocupará de forma temporal el Camiño Inglés, por lo que habrá un desvío.