La Diputación cita a los propietarios de las 22 fincas que expropiará para la construcción de una senda peatonal en la carretera CP-3104 a su paso por el núcleo de Liñares, en el concello de Culleredo, en el entorno del aeropuerto de Alvedro. El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) publicó ayer el anuncio del levantamiento de actas previas a la ocupación de los terrenos de los predios afectados por el proyecto, en el que la institución provincial invertirá 553.442 euros, a los que se suman los 11.899 euros que se destinan a las expropiaciones necesarias para la ejecución. La obra atiende a una antigua reivindicación de los vecinos de Liñares y del Concello cullerdense, apuntó el alcalde y diputado, José Ramón Rioboo, al área provincial de Vías y Obras.

Los vecinos propietarios de las fincas están citados el día 21 de este mes, entre las 16.00 h y las 16.45 h, en el salón de plenos de la Casa del Concello de Culleredo. Han sido convocados en tres turnos, según detalla el anuncio en el BOP.

Las obras supondrán la construcción de una senda peatonal de cerca de 1,8 kilómetros de longitud, que partirá de la iglesia antigua de Santo Estevo, en Tarrío, y terminará en la intersección de la DP-3104 con la carretera Nacional-550 (carretera de Santiago) en Alvedro.

El alcalde recuerda que el núcleo, “a pesar de contar con numerosas viviendas en las márgenes de la carretera, carecía hasta ahora de un itinerario peatonal seguro”. Celebra que se atienda esta antigua reclamación para la seguridad peatonal.

La senda tendrá dos tipologías diferenciadas. En la zona donde hay viviendas, entre los puntos kilométricos 1+360 y 2+305, se construirá con adoquín prefabricado de hormigón sobre base de zahorra, mortero y hormigón, mientras que en el resto de la obra se ejecutará con aglomerado asfáltico, a medio metro de la marca vial del borde actual de la carretera. En los cruces de calles, el adoquín de hormigón se sustituirá por pavimento de adoquín de piedra natural.

Durante las obras será necesario ejecutar algunos muretes y retranquear el eje de la carretera en dos tramos, además de desmontar un talud. La senda contará con red de recogida de pluviales con tuberías de PVC y los correspondientes pozos de registro y sumideros. Se renovará la señalización vertical y horizontal de todo el tramo. El plazo de ejecución será de cuatro meses.