La alcaldesa de Betanzos, María Barral, invita a la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, a comprobar por sí misma el malestar por los cambios en el servicio de bus: “Que venga un día, como usuaria y vecina, no como conselleira, y compruebe por ella misma lo que le dicen los usuarios y usuarias de este servicio”, reta la regidora tras el intercambio epistolar de reproches con la responsable autonómica.
Las quejas por los cambios en el servicio de transporte continúan suscitando a diario las protestas de los usuarios. Al mediodía de ayer, en la parada de Irmáns García Naveira varios usuarios trasladaron a este diario su indignación por la modificación de horarios y frecuencias.
Las quejas se repiten en otros municipios. El Concello de Miño acaba de aprobar una moción para instar a la Xunta a reponer de forma inmediata las paradas y líneas suprimidas desde el 10 de enero y a aumentar las frecuencias para incentivar el uso del transporte público. El Gobierno gallego realizó mejoras a raíz de las protestas, pero los ayuntamientos de Betanzos y Miño sostienen que son insuficientes.
