Sada volvió hoy al presente tras el chapuzón modernista del fin de semana. Un pícnic popular, una exhibición de vehículos clásicos, talleres de danza a cargo del colectivo Ghastas Pista y sesiones de ilusionismo y adivinación con el mago Gadalka amenizaron la última jornada de la Feria Modernista. La música puso el broche a la celebración con los conciertos de Ghastas Pista y La habitación de la música. A lo largo del fin de semana, cientos de personas disfrutaron de este tradicional viaje al pasado que organiza el Concello de Sada y que tuvo un año más como epicentro su bien modernista más preciado: La Terraza.

Sada despide la feria modernista con un pícnic y swing