El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, y gran parte de su Corporación municipal, descubrieron esta mañana un enorme cartel metálico que habían instalado unas horas antes unos operarios en la parada de autobús de Santa Cristina. Tras retirar el plástico, apareció una fotografía de un bus urbano de Tranvías de A Coruña y sobre él la frase: "Xunta Non hai billetes!".

Con esta performance, esta representación como las que suele realizar, García Seoane quiso denunciar la situación de bloqueo en la renovación del servicio del bus 1A y que en lugar de dar la vuelta en A Pasaxe continúe hasta Santa Cristina todo el verano para facilitar el acceso a la playa. "Incomprensiblemente la Xunta no autoriza el transporte de los coruñeses a la playa de Santa Cristina", destacó el regidor, que solicitó al Gobierno gallego la renovación del convenio que hace posible este servicio que se presta desde hace cuatro años.

El Ejecutivo gallego rechaza renovar el acuerdo si el Concello de Oleiros no cumple una de las cláusulas firmadas en su día: compensar las pérdidas de viajeros a la empresa de transporte interurbano que cubre esta línea (una UTE con Cal Pita). La Xunta estimó las pérdidas de la compañía en 50.000 euros y exige que el Ayuntamiento se los abone como aceptó hacer cuando rubricó el acuerdo. El Gobierno oleirense está dispuesto a pagar como incluía el convenio pero si la empresa presenta las facturas correspondientes que acrediten dichas pérdidas porque 50.000 euros "equivalen a 60.000 viajes y que perdió tantos viajeros no lo cree nadie", afirma Seoane.

El alcalde y candidato a la reelección planteó que para que los usuarios no dejen de tener este servicios público de transporte, que en teoría tendría que comenzar el próximo 15 de junio, la Xunta debe autorizar la renovación del convenio y de forma paralela, si la empresa quiere, que denuncia a Oleiros. "Que la empresa me lleve a los tribunales y los jueces decidan si tengo que pagar 50.000 euros u otra cantidad. La Xunta no puede cortar este servicio, está actuando casi como la cobradora del frac. Yo no voy a pagar a nadie un dinero que no me justifique", reiteró García Seoane.