Detienen al exnovio de una víctima como posible cerebro del crimen de Chiloeches

Al arrestado se le imputa de manera provisional el delito de robo con violencia en calidad de inductor | El joven habría aportado datos para el asalto

Uno de los detenidos por el triple crimen de Chiloeches.  | // E. PRESS

Uno de los detenidos por el triple crimen de Chiloeches. | // E. PRESS / David López Frías

David López Frías

Sobre Cristian B. recayeron todas las sospechas desde el momento en el que se supo que su exnovia Laura y los padres de esta habían sido asesinados en su casa de Chiloeches (Guadalajara). Y es que sobre él ya pesaba una orden de alejamiento de la chica. Ahora, agentes del Grupo de Homicidios de la Comandancia de Guadalajara han detenido al joven de 22 años en relación con los hechos que aún se investigan.

Según ha podido saber El Periódico de España, del mismo grupo editorial que LA OPINIÓN, se le imputa de manera provisional el delito de robo con fuerza en domicilio, en calidad de inductor. Porque los investigadores ya saben que el único que se adentró en el chalet de la urbanización Medina Azahara en la que residía la familia Villar Fernández fue Fernando P.S., amigo íntimo de Cristian y actualmente en prisión, que ya habría confesado ser el autor material del triple crimen después de haber entrado a robar y haber sido reconocido por la familia.

El otro detenido es David M.A., sobrino de Cristian, que habría esperado a Fernando en el exterior de la casa con un Peugeot negro para darse a la fuga. Hubo otra persona detenida, Windybeth B.G., pareja de Fernando; ella es la única que ha quedado en libertad provisional.

¿Qué papel tuvo entonces Cristian en el suceso? Porque el joven ya fue interrogado en las primeras horas posteriores al crimen y fue puesto en libertad. Fuentes próximas a la investigación consideran que él fue el inductor del robo. Cristian, que mantuvo una relación de varios meses con Laura Villar Fernández, la joven de 22 años asesinada a machetazos en su propia casa durante el asalto, conocía datos concretos de la casa, que habría revelado a Fernando.

Cristian sabía por su exnovia que Ángel, el padre de familia, tenía una colección de relojes de alta gama guardada en una de las estancias del domicilio. También que solía almacenar una cantidad importante de dinero en metálico. Tras su ruptura con Laura, Cristian fue denunciado por la chica, por lo que no podía acercarse a su domicilio. Pero le habría dado estos datos a Fernando y a David, para que fuesen ellos los que accediesen a la casa.

Cristian, un joven problemático según contaban fuentes vecinales de Pioz (su municipio de residencia), tiene 23 años y antecedentes por robo con fuerza y estafa, además de la mencionada orden de alejamiento de Laura. Él, junto a su sobrino David y su amigo Fernando, se hacían llamar la “Mafia de Pioz”, y así es como se etiquetaba en las fotos y vídeos que subían en redes sociales. La mayor parte de estos jóvenes tenían problemas de adicciones y practicaban artes marciales.