A río revuelto, ganancia de pescadores, dice el refrán. Y pese a que la huelga de autobuses tuvo un reguero de afectados por toda la comunidad, también hubo beneficiados: los taxistas y el tráfico. Tanto Tele Taxi como Radio Taxi reconocieron que los paros de los dos días repercutieron en el incremento de los servicios. "Tuvimos que atender a los compromisos que tienen los autobuses. Por ejemplo, con los trabajadores de Pull and Bear que van a trabajar a Narón o con viajeros que iban a ir tanto a Alvedro como a Lavacolla en autobús y tuvimos que ir nosotros", explican desde Tele Taxi.

"Hemos hecho más viajes de los habituales desde la estación de tren al aeropuerto o a ayuntamientos limítrofes", reconoce Leopoldo Villa, portavoz de Radio Taxi.

La huelga también dejó otros perjudicados. Como los viajeros de un vuelo que tenía que aterrizar en A Coruña, pero por la niebla fue desviado a Santiago, y como allí no había autobuses el avión volvió a Madrid. La segunda jornada, al igual que la primera, transcurrió sin incidentes, salvo dos autobuses que aparecieron con las ruedas rajadas en Ourense.

Además de los taxis, el tráfico también se benefició de la huelga. "Se ha notado un poco menos de tráfico al sacar los autobuses escolares de las calles. El tráfico era más fluido", aseguró Leopoldo Villa.