Todos los grupos municipales, a excepción del popular, respaldaron este jueves en el pleno que el almacén de carbón conocido como la Medusa permanezca en el muelle del Centenario y que, tras haber dejado de ser utilizada por Naturgy por el cierre de la central térmica de Meirama, sea destinada a usos ciudadanos.
La moción presentada por Marea Atlántica defendía que el denominado Palacio del Carbón, cuya entrada en funcionamiento se produjo en el año 2007, continúe en su actual emplazamiento si la Autoridad Portuaria acredita que es posible y que si es así, sea descontaminada y acondicionada para que pueda ser “puesta a disposición de la ciudadanía”, según explicó la portavoz del grupo María García. El Puerto asegura que es “inviable” cualquier otro uso portuario o ciudadano en la ubicación actual, por lo que la empresa tendrá que retirar la cúpula en el plazo de un año, según marca la normativa.
La concejala recordó que todas las propuestas finalistas en el concurso sobre el diseño de la fachada marítima que se convocó en el pasado mandato apostaban por mantener la Medusa en el puerto. El portavoz del Gobierno local, José Manuel Lage, coincidió en la idoneidad del Centenario como ubicación del edificio por contar con “cualidades estéticas indudables” y “potencial eventos de muy distinto tipo que muy pocos recintos pueden ofrecer”.
Lage manifestó que si en el muelle de la Batería está prevista la realización de toda clase de actividades ciudadanas, también se pueden “soñar” usos semejantes en la Medusa. Pero advirtió de que su grupo no se cierra a un traslado si no es posible utilizarlo en el Centenario.
Para el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, un traslado de la Medusa le haría perder la “referencialidad” que ahora posee en el perfil urbano de A Coruña. En caso de que su permanencia y su uso ciudadano fuera incompatible con la actividad portuaria, propuso que se traslade a los muelles que se liberen al considerar que se trata del mejor emplazamiento posible. También reclamó un plan de usos mediante la consulta con expertos para evitar las “ocurrencias”, ya que teme que se convierta en una “cáscara vacía” por la existencia de otros recintos para actividades en la ciudad.
Para la concejala no adscrita Isabel Faraldo lo “ideal” es que la Medusa siga en el muelle del Centenario, aunque exigió conocer la opinión de la Autoridad Portuaria sobre esta cuestión. El Partido Popular fue la única voz discrepante en el pleno, ya que se abstuvo al estimar “tremendamente complejo” darle un uso ciudadano al recinto, según explicó el concejal Antonio Deus, quien recordó que, aunque su desmontaje para un posible traslado será costeado por Naturgy, el montaje posterior en otro lugar costaría un millón de euros, al que habría que sumar el de la cimentación, que sería elevado, según sus cálculos.
Deus advirtió además que “lo importante es tomar decisiones sobre los muelles”, en alusión a la exclusión del presupuesto municipal de este año de fondos para la adquisición de la Batería y Calvo Sotelo, de la que culpó a Marea Atlántica, ya que este grupo condicionó su apoyo a las cuentas a que no se destinarán recursos a esa iniciativa.
