Urbanismo en A Coruña: A Coruña fijará criterios "claros" para evitar afear edificios singulares de viviendas

Un estudio establecerá condiciones “claras y homogéneas” para no afear o alterar de forma significativa inmuebles con diseños similares en zonas como Adormideras, Os Rosales, Labañou, Elviña, Matogrande y Barrio de las Flores

Edificios residenciales singulares en el Barrio de las Flores. |   // CARLOS PARDELLAS

Edificios residenciales singulares en el Barrio de las Flores. | // CARLOS PARDELLAS / R. D. Rodríguez

El Gobierno local ha contratado la realización de un estudio urbanístico con el que pretende establecer criterios estéticos homogéneos en las futuras intervenciones que se lleven a cabo en edificios residenciales singulares de la ciudad. El propósito de esta contratación es evitar posibles daños y desajustes en la utilización de elementos, colores y materiales de construcción mediante la unificación de las condiciones estéticas de las obras que se ejecuten en estos inmuebles, que son los que se corresponden con la norma zonal 1 del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM).

Estos edificios se ubican en ámbitos de suelo urbano donde ya no se puede construir más porque ha concluido el proceso de ocupación de suelo de acuerdo con las ordenaciones volumétricas procedentes de los planes generales. En la ciudad se localizan en diferentes zonas, como Adormideras, Barrio de las Flores, Elviña, O Birloque, avenida do Ferrocarril, Matogrande, Labañou y Os Rosales.

En estos barrios o en determinadas zonas de estos barrios hay varios inmuebles de viviendas singulares cuya construcción es similar o bastante parecida, por lo que constituyen bloques gemelos con los mismos elementos estéticos, aunque no siempre con el mismo número de alturas. Esto ocurre en Os Rosales, Adormideras, Matogrande o el Barrio de las Flores, donde se trataría de evitar que futuras obras en las fachadas o en cubiertas, o incluso actuaciones relacionadas con la eficiencia energética, tuviesen diferentes criterios que pudiesen afear o alterar significativamente el aspecto estético de los edificios.

También en la ciudad hay otros inmuebles de la norma zonal 1 aislados en otros ámbitos donde al resto de inmuebles les corresponde una calificación zonal distinta; así, hay bloques residenciales singulares en As Lagoas frente a la Casa de los Peces, en un lateral de la calle Zalaeta, en Manuel Murguía frente al estadio de Riazor, en el Paseo de los Puentes, en O Ventorrillo detrás del centro de salud o las viviendas Nuestra Señora del Carmen en Labañou. En estos edificios también se actuaría con la misma homogeneidad de criterios.

Edificios como los de los hoteles Meliá María Pita y Riazor en el paseo marítimo, la antigua sede de Padre Rubinos, las torres de San Diego y la torre Efisa en Cuatro Caminos tienen también la calificación zonal 1, por lo que sobre ellos se podrá establecer el mismo tipo de criterios estéticos. Su tipología edificatoria reconoce su singularidad, con volumen, usos y demás características tipológicas que concurren en la edificación singular existente.

El estudio contratado por el Gobierno local el pasado mes de octubre, a través de un contrato menor por el importe de 7.744 euros que ha sido encargado a la Universidade da Coruña (UDC), prevé crear fichas “edificio por edificio en las que se establezcan criterios “claros y homogéneos” para cualquier actuación” que se realice en esos edificios, explican fuentes municipales.

El uso de distintos colores para pintar fachadas cuyo diseño es idéntico, o de instalar sistemas de ahorro energético diferentes en bloques residenciales construidos con los mismos elementos son, por ejemplo, actuaciones que pretende evitar la implantación de estos criterios estéticos homogéneos, que determinará el estudio encargado a la UDC.

El uso característico que corresponde a la norma zonal 1 del PGOM es el residencial en clase residencial vivienda, aunque admite usos compatibles complementarios de tipo industrial general, comercial, oficinas, almacén, servicios empresariales e I+D+i, talleres, garaje, equipamientos y terciarios de clase espectáculos y hostelero.

El Concello promovió también el año pasado una modificación en el planeamiento municipal para cumplir el acuerdo que evitó la demolición del edificio Fenosa a comienzos de 2019. El Gobierno local impulsaba un cambio urbanístico relativo a la norma zonal 1 por el cual el inmueble de la calle Fernando Macías estaría incluido en la categoría de edificio singular. La Xunta, a través de la Consellería de Medio Ambiente, dio vía libre al Ayuntamiento para la modificación, aunque indicó al Concello que revisase el catálogo de bienes protegidos incluido en el propio plan general con el fin de “identificar todos los bienes culturales que puedan verse afectados “por el cambio urbanístico.

Fuentes municipales indican que el contrato para determinar los criterios estéticos homogéneos en los edificios residenciales singulares no está vinculado al cambio para calificar como singular el edificio Fenosa, al que le corresponde una calificación zonal

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