La Xunta retrasa un año, hasta 2026, la finalización de las obras de los accesos al Chuac

El pleno municipal vota hoy una modificación al acuerdo con el Gobierno gallego para los trabajos que implica alargar los pagos

La ejecución de los viales durará dos años pero el concurso, abierto en julio, sigue sin adjudicarse

Recreación virtual de los accesos al Chuac.   | // LA OPINIÓN

Recreación virtual de los accesos al Chuac. | // LA OPINIÓN / E. Carballo / R. D. Rodríguez

El pleno municipal de este jueves debatirá si aprobar una actualización del convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y la Xunta para construir los accesos al Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (Chuac), que modifica el periodo de financiación de los trabajos debido a que su finalización se ha retrasado un año. Hasta ahora estaba previsto invertir 25,4 millones (de los que un máximo de 22,2 millones son municipales), desde este año hasta 2025, pero, si se aprueba la modificación que se vota este viernes, ahora la cantidad se dividirá en cuatro ejercicios, prolongándose hasta 2026. La iniciativa del cambio parte de la Xunta, que pide una “adecuación” de los anualidades debido a la tardanza en contratar las obras; la redacción y ejecución de estas, cuya duración se calcula en dos años una vez que se adjudique el contrato, todavía salieron a concurso en julio.

La obra de los accesos al Chuac, y su financiación, tiene un largo recorrido: los presupuestos municipales de 2022, prorrogados este año, ya reservaban 50.000 euros para expropiaciones. El Gobierno gallego y el Concello estuvieron atascados durante meses el año pasado, sin llegar a un acuerdo para el proyecto: la Xunta pedía al Ayuntamiento que comprometiese partidas presupuestarias para pagar los trabajos, algo que el Gobierno local consideraba “excusas técnicas”. Fuentes de la Xunta admiten que tardaron en preparar el proyecto “por retrasos con el Concello”.

En mayo, finalmente, se firmó el convenio entre las dos administraciones, que contempla un coste de 25,4 millones dividido en tres anualidades: un millón en 2023, ocho en 2023, y 16,4 millones en 2025. Esto obligó al Ayuntamiento, que solo tenía 50.000 euros del presupuesto prorrogado para invertir en este fin, a pedir un crédito para pagar el resto del dinero.

Aunque el Concello aporta la mayoría de los fondos, el encargado de contratar las obras es el Sergas, que depende del Gobierno gallego. Desde la Xunta, según el informe municipal que irá mañana a pleno, “puso de manifiesto” que debido al estado del concurso, abierto a mediados de julio, hay que incorporar una addenda para “la adecuación de las anualidades previstas en el convenio, ampliándolas un año más, hasta 2026”. Esto coincidiría con una adjudicación de contrato en 2024, a la que seguirían dos años para ejecutarlo.

El motivo, señala el informe municipal, es “acompasar” los pagos al “ritmo de ejecución de las obras”, aunque el texto puntualiza que el cambio no afecta al importe total a invertir, ni a la cantidad que deberá pagar el Ayuntamiento. La nueva distribución de gastos sigue en 25,4 millones, pero para este año solo se asignan 50.000, mientras que la suma de 2024 queda en ocho millones, la de 2025 baja a diez millones y para 2026 se incorporan 7,35.

Estas anualidades le corresponden íntegramente al Concello, con la excepción de la última, en la que el Gobierno gallego aportará algo menos de 3,2 millones. El Sergas también adelantará los 50.000 euros de este año, aunque el Concello deberá devolverle el dinero en el primer trimestre de 2024. El informe sobre este asunto, que se presentará este viernes fuera del orden del día previsto en el pleno, está acompañado de una nota de conformidad del secretario municipal, y un informe favorable del interventor.

Este funcionario, encargado de auditar la actividad municipal, destaca sin embargo que el informe adolece de una “falta de valoración de la estabilidad presupuestaria” y no contempla la “capacidad” del Concello de “afrontar las aportaciones comprometidas”. En especial, indica, no se ha tenido en cuenta “el impacto en los presupuestos futuros” que implica este compromiso plurianual, y tampoco el cumplimiento de las reglas fiscales.

El pleno, que debe refrendar este tipo de acuerdos del Concello con otras administraciones, deberá votar este viernes la incorporación de la addenda y el compromiso de gasto hasta 2026. Esto implica que la anualidad de 2024 “será de incorporación obligatoria” al presupuesto municipal de ese año: el mes pasado el Gobierno local y el BNG han empezado las negociaciones para elaborar las cuentas. Estos dos grupos suman quince concejales de los 27 de la corporación municipal, y los otros doce son del Partido Popular, la formación que está en el Gobierno gallego, por lo que lo más probable es que no haya problema en aprobar la iniciativa.

Once ofertas y 18 empresas

La Xunta recibió once ofertas para realizar los trabajos de los accesos al Chuac, siete de ellas participadas por más de una empresa. En total, son 18 las compañías interesadas en participar en la obra, que remodelará las infraestructuras de la zona. La conexión con la AC-12, de la que el Gobierno gallego ha asumido la titularidad, se hará a través de un enlace tipo trompeta y una glorieta de 41 metros de diámetro. De acuerdo con la Xunta, esta solución permitirá optimizar los accesos al hospital San Rafael.

También se prevé ejecutar un anillo de conexión perimetral que conectará en varios puntos con la red viaria ya existente, y que permitirá dar acceso directo a los diversos servicios del complejo. Supondrá ejecutar más de 20 ejes y cuatro kilómetros de vías. En cuanto a la AC-10, se contempla la construcción de un acceso provisional de salida durante la ejecución de los trabajos, para facilitar estos. Al Oeste de la calle Curramontes, de acuerdo con las previsiones del Gobierno gallego, se habilitará un aparcamiento temporal que tendrá más de 5.000 metros cuadrados de superficie y que sumará 195 plazas de estacionamiento.

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