El Museo de Arte Contemporáneo de A Coruña, un lustro cerrado y con el proceso para blindarlo como museo sin concluir tras tres años

El plan municipal para que solo se pueda dedicar a uso cultural pasó por la junta de gobierno en 2020 y por pleno en octubre de 2022, pero sigue sin hacerse efectivo, y tampoco se concretaron los proyectos para revivir el espacio

El antiguo Museo de Arte Contemporáneo, cerrado desde hace casi cinco años.   | // CASTELEIRO/ROLLER AGENCIA

El antiguo Museo de Arte Contemporáneo, cerrado desde hace casi cinco años. | // CASTELEIRO/ROLLER AGENCIA / Enrique Carballo

El Museo de Arte Contemporáneo (MAC) cumple en diciembre un lustro cerrado sin que se hayan concretado los planes para reabrirlo, o, al menos, asegurar que siga siendo un espacio cultural. El Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) permite que la finca se destine a actividad industrial y comercial, y el Concello promovió en el pasado mandato, dentro de una modificación más amplia del plan general, un cambio para limitarlo a “equipamiento cultural privado”. Se dieron pasos para realizar esta modificación: una primera versión fue a la Junta de Gobierno Local en noviembre de 2020, y el pleno municipal le dio el visto bueno el 13 de octubre del año pasado, pero sigue sin hacerse efectiva. El Gobierno local tiene que volver que llevarlo al pleno para la aprobación provisional, previa a la definitiva, y no pone fecha. Según afirman fuentes municipales, “el proceso sigue su tramitación normal”.

El pasado mandato, el Gobierno local justificó la recalificación del inmueble, situado en la avenida de Arteixo y al que muchos recuerdan como Museo de Arte Contemporáneo Gas Natural Fenosa (Macuf), en base a que quería adaptarla a su “uso real”, refiriéndose al que desempeñó durante décadas. El edificio, originalmente adosado a la sede central de Fenosa, acogía exposiciones e iniciativas culturales y contaba con un fondo de más de 600 obras. Al MAC, abierto en 1993, acudían los alumnos de centros escolares de toda Galicia, y se realizaban visitas guiadas y talleres. El edificio albergó también, hasta 1999, un Museo de la Electricidad.

Con la calificación actual, la empresa propietaria del edificio, Naturgy (antes Gas Natural, nombre con el que adquirió Unión Fenosa en 2009), podría dejar a un lado este legado cultural y dedicar el edificio a actividades económicas, o venderlo a terceros para estos fines.

Los diferentes Ejecutivos municipales que pasaron por la ciudad han defendido que el inmueble debe reabrir como museo, pero nunca se tomaron medidas efectivas. Cuando el MAC cerró Marea Atlántica ocupaba el Gobierno local, y apostó por la creación de una fundación entre el Concello, la Xunta, la Diputación y el Ministerio de Cultura. El entonces edil de Cultura, José Manuel Sande, decía en 2018 que el resto de administraciones habían “manifestado su compromiso”. El Concello también afirmó que había contactado con otras empresas y fundaciones privadas.

Al año siguiente cambió el Ejecutivo municipal local, y en octubre de 2019 la nueva alcaldesa, Inés Rey, solicitó a Naturgy que el museo reabriese. El entonces edil de Cultura, Jesús Celemín, ponía una línea roja negándose a que el Concello “pagase un alquiler” por el edificio, aunque una de las posibilidades estudiadas fue el alquiler el arrendamiento temporal. En diciembre de ese año, Diputación, Concello y Naturgy se reunieron, sin resultado.

Pero pese a estas declaraciones y aunque el Gobierno local defendió el pasado mandato que estaba manteniendo “contactos de manera permanente” con Naturgy y otras entidades, que se prolongaron al menos hasta 2022, el antiguo museo permanece cerrado y sin plan de futuro. Celemín admitió en febrero de 2020 que el proceso para reabrir el museo estaba en un “impasse”, y la palabra se puede seguir aplicando a la situación tres años y medio después.

Tampoco movió ficha la Xunta, a quien, según el Gobierno local, le correspondía tomar la iniciativa para salvar el museo, como “entidad superior”. Pero el Gobierno gallego no intervino. Aunque se interesó por la colección artística del MAC, que pretendía incorporar a la red de museos gallegos (Naturgy indicó que las obras de arte se guardaron en un almacén de Agrela) la Consellería de Cultura e Turismo afirmó que revivir el MAC era “un proyecto que está liderando el Concello de A Coruña”, y se limitó a prometerle apoyo cuando se pusiese manos a la obra.

Cambio en los equipamientos

El cambio de usos del MAC se incluyó dentro de una modificación normativa más amplia relativa a los equipamientos, esto es, edificios de uso público como colegios, centros sanitarios y deportivos e iglesias. La aprobación inicial que fue a pleno el año pasado incluye reconocer el volumen de un inmueble ya construido, aunque “supere los parámetros” obligatorios. Esta disposición, que no estaba en el primer borrador de 2020, fue criticada por Marea Atlántica, que consideró que esto supondría “indultar” a inmuebles irregulares.

Aunque el edil de Urbanismo, Díaz Gallego, afirmó que no era una “amnistía urbanística”, Marea votó en contra de la aprobación inicial, mientras que el BNG se abstuvo en espera del periodo de alegaciones, algo que todavía no se ha resuelto. La iniciativa salió adelante con el respaldo del Partido Popular.

La modificación también incluye reducir el plazo de tramitación de los proyectos de obras en los equipamientos, así como las restricciones urbanísticas a los centros privados que formen parte de manzanas con otros inmuebles. En cuanto a los aparcamientos, el cambio, en caso de que se apruebe finalmente, reduciría las plazas de parking que deben incluir obligatoriamente todos los equipamientos, algo que, según el Concello, busca desincentivar el uso del vehículo privado. El documento también preveía recalificar la parcela que posee Defensa en A Maestranza como espacio libre (actualmente se pueden construir pisos), aunque este mes de mayo el Concello anunció que renunciaría a esto para que el Ministerio ceda la finca a la entidad estatal Sepes y esta levante allí 77 pisos públicos.

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