El ascensor de San Pedro seguirá cerrado y necesitará una reforma de 750.000 euros

El ascensor del monte de San Pedro lleva un año parado, sin uso, y, en principio, así seguirá durante los próximos meses. El Gobierno local acaba de resolver el contrato con la empresa que se encargaba, de forma forzosa, del mantenimiento, conservación y seguridad del funcionamiento de este elevador porque, apunta, “la situación no va a cambiar a corto plazo” y los costes de mantenimiento son “muy elevados”. El Concello asegura que va a “reformular el futuro” de la instalación, cuya reforma, presupuestada en 750.000 euros, figura en las cuentas municipales de 2024.

La Junta de Gobierno Local dio luz verde ayer a la resolución del contrato con la empresa Talentorbis Maquinaria e Industria, que seguía encargándose del mantenimiento del ascensor por una prórroga forzosa del contrato que se llevó a cabo en agosto debido a que el concurso que sacó el Concello quedó desierto. El presupuesto era de 1,1 millones por un plazo de dos años.

Para mantener el contrato con la empresa que hasta el momento prestaba el servicio, el Concello alegó que dejar el aparato sin mantenimiento “produciría un grave trastorno en el servicio público y perjuicios sociales y laborales”. Desde Talentorbis señalan que el Concello les “obligó” a seguir prestando el servicio de mantenimiento ante la falta de ofertas. “El concurso quedó desierto y no sacaron uno nuevo. Nosotros no nos presentamos, no queríamos continuar porque las condiciones, tanto las actuales como las del nuevo, no nos parecían razonables, interesantes, ni buenas, son los precios del 2016. Así se lo dijimos al Concello”, defienden desde Talentorbis. La relación entre ambos ha finalizado porque, apunta el Ayuntamiento, “se entienden superados los razonamientos y argumentos que sirvieron de base para que se acordase la continuidad en la prestación de los servicios”.

La resolución del contrato, sin embargo, no soluciona la situación actual del elevador del monte de San Pedro, que sigue parado por una avería. El Concello dijo el pasado verano que la reparación del ascensor estaba “a punto de finalizar”, cuando la instalación llevaba ya nueve meses clausurada. La empresa que hasta ahora se encargó del mantenimiento aseguró que el problema que provocó el cierre está subsanado desde el pasado mes de marzo, pero que faltan actuaciones importantes que requieren inversión. Esta situación hace que el elevador no funcione, que nadie pueda ni subir ni bajar en él y, ni mucho menos, disfrutar de las vistas panorámicas desde su privilegiada situación.

El propietario de Árbore da Veira, Luis Veira, que asumió la concesionaria del elevador y también del restaurante, dijo que su preocupación es la tesitura de los trabajadores del ascensor, que están en ERTE.

No hay noticias detalladas sobre los planes que tiene el Concello para esta instalación, aunque sí ha añadido una partida en los presupuestos para 2024 que acaban de ser aprobados. Un total de 750.000 euros se destinarán a la reforma de la gran bola de cristal, aunque no se ha precisado de qué manera se va reformular el futuro del ascensor.