¿Por qué hay un nivel rojo por mala calidad del aire en A Coruña?

RAC

“Una gran columna de polvo del desierto del Sáhara voló sobre el Océano Atlántico y luego hacia Europa, provocando neblina y mala calidad del aire en Cabo Verde y las Islas Canarias”. Esta es la descripción que realizó la NASA este pasado martes sobre un fenómeno que también ha afectado, en menor medida, a Galicia y a A Coruña.

Este es el motivo de que Meteogalicia, en su previsión meteorológica a corto plazo, incluya una advertencia en la que señala que el índice de calidad del aire se sitúa en el nivel de “mal”, en alerta roja, según figura para este miércoles, jueves y viernes, según recoge la web de agencia autonómica.

Nivel rojo en cuatro estaciones

En A Coruña ciudad y alrededores existen, en la mañana de este miércoles, cuatro estaciones de calidad del aire en nivel rojo (Ánxel Casal, Riazor, A Silva y Meicende) y otras tres en alerta amarilla (monte de San Pedro, Pastoriza y Sabón). Las mediciones que se encuentran más altas de lo normal son las correspondientes a las PM 2,5 y PM 10. Las primeras son partículas muy pequeñas suspendidas en el aire que tienen un diámetro de menos de 2.5 micras y las segundas varían entre 2,5 y 10 micras.

Este episodio se hizo notar este pasado martes y hoy vuelve a surgir de nuevo, según las mediciones de las estaciones.

La exposición prolongada o repetitiva a estas últimas puede provocar “efectos nocivos en el sistema respiratorio de la persona, no obstante son menos perjudiciales que las PM2,5 ya que al tener un mayor tamaño, no logran atravesar los alveolos”, según asegura el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico.

A Coruña, en la mañana de este miércoles

A Coruña, en la mañana de este miércoles / Iago López

El polvo tiende a permanecer en altitudes bajas en invierno

La NASA señala que “grandes columnas de polvo sahariano pueden surgir en cualquier época del año, pero su destino depende de la estación”. “Desde finales de la primavera hasta principios del otoño, la capa de aire del Sahara transporta polvo en lo alto de la atmósfera hacia el oeste a través del Océano Atlántico y puede suprimir la formación y la intensidad de ciclones tropicales.

Por el contrario, el polvo que emerge del continente durante el invierno y la primavera tiende a permanecer en altitudes más bajas y es transportado por los vientos alisios del noreste”, explica.