El futuro de las bibliotecas de A Coruña, de atasco en atasco

A Coruña tiene una extensa red de bibliotecas municipales, uno de los legados culturales de la época del alcalde Francisco Vázquez. Pero desde su creación, ha quedado dividida: parte de sus trabajadores son funcionarios, pero la mayor parte es personal subcontratado de una empresa concesionaria. La idea de unificar el servicio bajo la gestión directa municipal es una de las reivindicaciones de las empleadas externas (la plantilla es mayoritariamente femenina) desde hace años, y en verano de 2022, cuando el personal se puso en huelga por impagos de la empresa que llevaba el servicio, el Gobierno local prometió estudiarla. Desde entonces se han sucedido los retrasos: el Gobierno local creó una comisión el 28 de febrero de 2023, pero solo tuvo una reunión en noviembre a la que no se invitó al personal. El BNG planteará una pregunta oral sobre este asunto en el pleno de este jueves, el PP resalta los problemas del servicio, y el comité de empresa critica al Gobierno local, que no ha respondido a las preguntas de este diario sobre esta cuestión, su “clarísima despreocupación”.

Para Elisabeth Rodríguez, la presidenta del comité, al Concello coruñés no le “preocupa” que la doble gestión genere “problemas”. “No interesa potenciar el servicio, da igual que se esté devaluando de forma constante”, señala Rodríguez, que afirma que las trabajadoras tienen condiciones “cada vez peores”. Aparte de las cuestiones laborales, hay problemas en las instalaciones. Este año las goteras que este año obligaron a cerrar parte de la del Fórum Metropolitano, mientras que en el centro de Os Rosales los vecinos denunciaron el pasado noviembre desprendimientos, humedades, techos agujereados y muebles deteriorados.

La sindicalista denuncia que el Gobierno local no ha redactado, o al menos no ha hecho públicas, condiciones para sacar un nuevo concurso para la concesión “en tiempo y forma”. “Estamos en el año de prórroga, y recordemos que acaba en noviembre”, señala Rodríguez.

Los grupos municipales pactan crear otra comisión para la unificación de las bibliotecas

Desde el Bloque recuerdan que la comisión para estudiar la gestión directa de las bibliotecas era uno de los puntos del acuerdo de investidura del año pasado, por el que votaron para revalidar a la socialista Inés Rey como alcaldesa. “Nos preocupa la falta de diligencia del Gobierno local a la hora de abordar los problemas de las bibliotecas municipales”, indican desde el grupo, que critica la duplicidad de la red.

El BNG añade que la comisión “solo se reunió una vez, el pasado mes de noviembre”, y no hay agendado un nuevo encuentro, lo que interpretan como “inacción y demora” por parte del Gobierno local. Como las trabajadoras, desde el BNG denuncian la “incertidumbre” de que la concesión esté en su último año de prórroga “sin que se sepa nada de los nuevos pliegos”.

El PP confirma que no hay novedades de la comisión, y considera que “Marea, PSOE y BNG llevan nueve años engañando” a la plantilla “con estudios y promesas que nunca llevan a realidades. Mientras tanto, “todo sigue igual y con las bibliotecas con goteras y problemas de mantenimiento como en Fórum u Os Rosales”, denuncia el grupo.

Ristra de promesas

Cuando ocupaba el Gobierno local, Marea Atlántica estudió que la empresa municipal Emvsa asumiese la gestión directa de las bibliotecas, pero en 2019 el Ejecutivo local socialista aparcó este plan, que, al igual que el PP, consideraba una solución “ilegal” y que “no daba garantías”. Pero no presentó un modelo alternativo hasta que en julio de 2022, coincidiendo con la huelga de bibliotecarias por problemas en el cobro, el portavoz municipal, José Manuel Lage, afirmó que el Gobierno local quería “mejorar el modelo” y encargaría un estudio técnico-jurídico para “unificar la red”. Este no se hizo público, si se llegó a elaborar.

En octubre de 2022, el pleno apoyó por unanimidad crear una comisión municipal para estudiar la remunicipalización, una iniciativa de Marea negociada con el PSOE; en diciembre, Lage admitió que iba “con retraso” y prometió avances “de inmediato”. La alcaldesa, Inés Rey, creó la comisión por decreto el 28 de febrero de 2023, y se pidió a la oposición y al comité de empresa designar representantes.

Un nuevo parón de nueve meses, y por fin hubo una primera reunión el 16 de noviembre, en la que no se invitó a la plantilla y para la que, según el PP, no se les proporcionó previamente “ninguna documentación”. Los ediles del Gobierno local y la oposición acordaron crear otra comisión técnica, constituida por altos cargos y funcionarios, y que debería evaluar la viabilidad de la “unificación” . Desde entonces, cuatro meses y medio de silencio.

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