La temporada pasada, el Dominicos salvó la categoría en la última jornada. Esta, la vida ha dado un giro de 360 grados y afronta el tramo final del curso con opciones de alcanzar la segunda plaza y clasificarse para el play off de ascenso a la OK Liga. Los de la Ciudad Vieja son terceros, a dos puntos del Vendrell —el primero, que asciende directo, es el Arenys de Munt y ya está disparado, a 8—. “Tenemos que recortar tres y solo quedan nueve en juego. Es difícil, pero ya que estamos ahí metidos, vamos a por ello”, destaca el entrenador Manuel Togores. Tres partidos que serán tres finales y dos de ellos, derbis coruñeses. El primero, mañana en el Agra contra el Liceo (17.00 horas). El siguiente en casa de Compañía en la clausura. Y entre medias recibe al Espanyol. El camino a un sueño.
“No contábamos con estar ahí”, reconoce Togores, que insiste en que el ascenso será una hazaña complicada. Cree que el Vendrell, un equipo con mucha veteranía, no fallará en sus tres compromisos: Espanyol, Compañía y Jolaseta. Y su propio calendario es complicado. “Los derbis siempre son derbis aunque ni Liceo ni Compañía se jueguen nada, siempre estará eso de ganar al vecino o, en el caso del Liceo, de intentar quedar por delante de nosotros, ese punto de orgullo”, analiza. Y aún en el caso de recortar la diferencia con el Vendrell y acabar segundo, quedaría otro paso para ascender, un cruce con el segundo del grupo sur. “Lo positivo es que no nos tenemos que desplazar y el Vendrell tiene dos salidas”, se aferra al positivismo.
La plantilla blanquinegra está concentrada pese a las tres semanas sin competición. “Los jugadores están enchufadísimos, súper motivados. A veces incluso hay que frenarlos. Ahora es el momento de estar frescos y jugar, porque en los entrenamientos ya no vamos a meter nada nuevo”, indica. El anterior parón le sentó mal al equipo. “Veníamos de cuatro victorias y por primera vez perdimos tres partidos seguidos. Ahora también veníamos de tres triunfos... así que siempre nos cogen los parones en buenas dinámicas”, se lamenta. Para mantenerse activos, jugaron un amistoso contra el Saint Omer, en la ciudad disputando la Golden Cup. Y es más fácil mantener la concentración cuando hay tanto en juego. “Hemos currado muy bien”, dice. Aunque sin Jacobo Copa y Bruno Saavedra —será baja mañana por sanción— que estuvieron con la selección.
Precisamente el crecimiento de los jóvenes es una de las diferencias con el año pasado. “Al ser un equipo tan joven, el tiempo siempre va a nuestro favor. Ya no solo Copa o Bruno... gente como Iñigo Varela, Javi Añón y Manu Fernández han dado un pase adelante importantísimo. Y también tenemos a Grasas que nos está aportando muchísimo”, valora y añade: “Que no sea el primer año del cuerpo técnico también ayudó. Ya nos conocen y confían en nosotros. Además también aumentamos el staff técnico y la estructura del club”. Todo suma en ese camino hacia la vuelta a la elite.
