Fútbol - Deportivo

Mucho por sumar aún en Riazor

La victoria contra el Nàstic alivió la falta de puntos del Deportivo en casa, pero el equipo todavía está obligado a mejorar el pobre rendimiento en su estadio hasta ahora

Marcos Otero

Marcos Otero

El Deportivo regresa mañana a Riazor (17.00 horas) obligado a conseguir ante la SD Logroñés una victoria que aparque la crisis abierta con la durísima derrota en Irún y empiece a enderezar su rumbo errático. Los resultados en casa, sin embargo, han sido inesperadamente discretos también para el conjunto blanquiazul en este arranque de temporada que terminó de torcerse la semana pasada ante el Real Unión.

Riazor debía ser el principal argumento para aspirar al ascenso directo. No hay ningún otro estadio de sus características en su grupo y nadie reúne a una media de 20.000 espectadores en su campo, pero el Deportivo por ahora no ha respondido. En cinco partidos disputados como local solo ha ganado uno, contra el Nástic hace dos semanas, y figura entre los conjuntos con registros más pobres delante de sus aficionados. Los seis puntos que ha sumado hasta ahora lo convierten en el decimoséptimo equipo del grupo como local, muy lejos de los 16 que ha sumado el Real Unión o los 12 de Celta Fortuna, Real Sociedad B o Cultural, precisamente los equipos que marcan el paso en la cabeza de la tabla.

El Deportivo no ha conseguido imponerse a rivales en teoría inferiores, como el Rayo Majadahonda, el Teruel o el Cornellà. Incluso tuvo que asumir el mal trago de perder frente al filial del Celta. Eso le colocó como uno de los peores equipos del grupo como local, al mismo nivel de los conjuntos más débiles como el Teruel o el Tarazona.

Buena parte de la explicación a ese pobre rendimiento se encuentra en los problemas para marcar que ha tenido el Dépor en Riazor. Solo ha marcado dos, contra el Cornellà y frente al Nàstic en su hasta ahora única victoria.