La oposición de Cambre encara la recta final hacia la moción de censura. PSOE, Unión por Cambre y Esquerda Unida alcanzaron un consenso ayer en un encuentro que se extendió durante dos horas y media. Aún así, no será este el acuerdo definitivo, pues los grupos quedaron en ponerse en contacto de nuevo en los próximos días. Los socialistas tienen aún pendiente una reunión con el BNG y el tiempo apremia, puesto que el plazo para presentar la moción se agota el miércoles a las 14.00 horas.

Pese a que apenas ha transcendido información sobre esta cita -LA OPINIÓN intentó, sin éxito, en reiteradas ocasiones ponerse en contacto con PSOE y UxC-, según ha podido saber este periódico ayer se pusieron sobre la mesa una serie de dificultades a la hora de organizar el nuevo Gobierno que podrían dar al traste con la moción. Las discrepancias no versan, como suele ser habitual, sobre el reparto de concejalías de un Ejecutivo que, de prosperar, estará encabezado por la número tres del PSOE, Margarita Iglesias.

El problema viene derivado de las reticencias de alguno de los concejales a la hora de dejar a un lado sus ocupaciones para desarrollar una labor al frente del Gobierno alternativo al del popular Manuel Rivas. Esquerda Unida, que avanzó el jueves su apoyo a la moción, concertará mañana una asamblea para decidir si entra a formar parte del Ejecutivo. En cuanto al organigrama de Gobierno, su portavoz, Luis Taibo, asegura que desconoce el contenido de la propuesta de PSOE y UxC. "Hasta que decidamos si entramos en el Gobierno, es algo que no nos incumbe", sostiene.