Loureda es una parroquia de Arteixo que tiene 1.607 habitantes y cuenta con una superficie de 15 kilómetros cuadrados. Es una de las zonas más rurales del municipio, que en el exterior es conocido por sus industrias. El Concello quiere dar a conocer el patrimonio que existe en esta parroquia, con lo que ha decidido organizar una ruta de turismo científico que se realizará el sábado 24 de marzo. Los participantes en esta salida podrán conocer la iglesia de Loureda, que cuenta con un retablo datado a finales del siglo XVIII, y el Coto de Santa Locaia, donde se ubica una de los miradores con mejores vistas de toda la comarca coruñesa.

Dos arqueólogas serán las encargadas de guiar la ruta que organiza el Concello, Puri Soto y Ana Corredoira. La primera de ellas explica que los "arteixáns no conocen Arteixo". Loureda cuenta con el Coto de Santa Locaia, en el que se encuentra un mirador desde el que se puede ver buena parte del municipio. Incluso en los días en los que no hace mal tiempo es visible la Torre de Hércules, situada a unos 20 kilómetros de distancia. Desde Santa Locaia se puede apreciar el valle en el que está enclavada Loureda. Puri Soto destaca que desde este lugar se puede apreciar que Arteixo es un "punto intermedio" entre el Golfo Ártabro y el Arco Bergantiñán.

Muy cerca de este mirador está ubicado el menhir de Erboedo, una piedra que marca la frontera entre Arteixo y A Laracha desde hace décadas. La excursión también pasará por este lugar. Este menhir también es conocido como la Pedra Fita dos Montes de Santa Leocadia o Pedra do Ghicho.

Otra de las paradas de la ruta será el iglesario, donde hay un retablo que está datado a finales del siglo XVIII. La representación es obra del escultor Xosé Ferreiro, autor del retablo del templo de San Martiño Pinario, en Santiago. Se trata de una pieza muy representativa en la historia del arte de la escultura gallega de la época. Puri Soto señala que este retablo ha sido "poco difundido".

Las dos arqueólogas que guiarán la salida acaban de descubrir un nuevo castro en la parroquia de Loureda. Ana Corredoira relata que cuando realizaba un trabajo para la universidad se dio cuenta de que en A Rocheira había un castro sin catalogar. Con este habría 30 yacimientos, de los cuales 19 serían castros. Lo vio a través de un programa en el que se puede consultar un mapa de sombras. Corredoira relata que ella y Puri Soto vieron "claramente un parapeto y la croa del recinto anexo". Tuvieron que hacer dos visitas al castro para lograr acceder a él. En la primera fueron incapaces de llegar debido a la vegetación existente.