El Consello da Xunta aprobó ayer ceder al Concello de Sada tres tramos urbanos de las vías autonómicas AC-162 y AC-163, entre ellos, el de la Avenida da Mariña, en el que se han registrado varios atropellos durante los últimos años que llevaron recientemente al Ejecutivo sadense a demandar pasos elevados y otras mejoras en la seguridad. El Gobierno gallego transfiere también al Ayuntamiento los tramos que se corresponden con las avenidas República Arxentina y Sada y Contornos.

El Ejecutivo gallego argumenta que con esta transferencia atiende la demanda del Concello sadense y destaca que se trata de tres tramos “con marcadas características urbanas” y que “presentan un tráfico principalmente de ámbito local”. El traspaso afecta concretamente a los puntos kilométricos 0 a 980 de la AC-162 y del 0 al 1+840 de la AC-163 y lleva aparejado que será Sada a partir de ahora quien asuma los trabajos de conservación y mantenimiento.

La transferencia de estos tres tramos viarios se produce cinco meses después de que el departamento de Infraestruturas plantease el cambio de titularidad de la avenida da Mariña “para facilitar una gestión más adaptada a sus características urbanas y a las necesidades del municipio”, dado que permitiría dejar sin efecto la aplicación de la normativa autonómica de carreteras, que es más restrictiva.

El traspaso, que fue solicitado formalmente por el Gobierno local tras el ofrecimiento autonómico, permitirá al Concello aumentar la anchura de las aceras y ofrecer mayor espacio para las terrazas de hostelería. Al no tener la protección en la margen de el Ayuntamiento también tendría más libertad en relación al edificio de La Terraza.

“Se podría estudiar alejar la circulación de este Bien de Interés Cultural”, avanzaba hace unos meses el alcalde, Benito Portela. La afección de la circulación a este emblemático quiosco modernista fue denunciada reiteradamente por expertos en patrimonio, que llamaron la atención sobre la necesidad de disminuir el tráfico y dotar a este BIC de un “entorno más noble”, en palabras del arquitecto José Ramón Soraluce.

La cesión de estos tramos de carreteras autonómicas recalará ahora en el pleno municipal, que debe aceptar la cesión. El Gobierno local (Sadamaioría, BNG y Alternativa dos Veciños) incide en la necesidad de que la Xunta acometa los arreglos precisos para entregar las vías en las “condiciones idóneas”.