El Consorcio adjudica la recogida y gestión de ropa y textiles por 6.000 euros para dos años

La empresa, Arroupa Santiago EIL, recibirá como beneficio lo que obtenga por la venta de los materiales y deberá suministrar al menos 53 colectores y vaciarlos como poco cada 15 días

Contenedor de ropa del Consorcio instalado en Betanzos. |   // L. O.

Contenedor de ropa del Consorcio instalado en Betanzos. | // L. O. / Sara Vázquez

El Consorcio As Mariñas ha contratado la recogida y gestión de la ropa usada y otros residuos textiles de origen doméstico por dos años, prorrogables uno más. La empresa adjudicataria, Arroupa Santiago EIL, abonará 6.004 euros por dos años —3.002 por ejercicio— al ente comarcal y recibirá como beneficio la cuantía que obtenga por la venta de los materiales.

El contrato está reservado a empresas de inserción y centros especiales de empleo de iniciativa social autorizados para el tratamiento de residuos, sin ánimo de lucro. La adjudicataria debe disponer de un sistema de separación en origen que garantice la posterior gestión de la ropa y los textiles de modo eficiente.

Los artículos textiles que abarcará el servicio y que los vecinos podrán depositar en los contenedores serán: ropa del hogar en general, como mantas, sabanas, edredones, colchas, cortinas o toallas; calzado; y complementos como cinturones, corbatas, tirantes, bufandas, guantes, bolsos o carteras. El servicio abarcará la recogida y el transporte hasta planta autorizada de ropa, calzado y otros textiles depositados por la ciudadanía —para lo cual la empresa deberá instalar al menos 53 contenedores, los existentes en la actualidad—, la instalación, limpieza, conservación y mantenimiento de los mantenimiento integral colectores; la gestión del residuo y del subproducto generado con disposición de las autorizaciones administrativas correspondientes; la garantía de la total trazabilidad de los residuos; y la realización de campañas de sensibilización.

La empresa deberá recoger los artículos depositados en los contenedores al menos cada 15 días, frecuencia que tendrá que aumentar “en las estaciones del año en las que se produce una mayor cantidad de residuos textiles”, apunta el pliego de condiciones técnicas que rige el contrato. “En caso de detectar un contenedor lleno o cerca de su nivel máximo, así como la presencia de residuos fuera del colector directamente en la acera, la adjudicataria estará obligada a vaciarlo en un plazo no superior a 24 horas”, detalla el documento. La empresa deberá aumentar frecuencias y la dotación de contenedores si la demanda y las necesidades del territorio así lo exigen y tendrá que informar al Consorcio en casos de incidencias por llenado de contenedores o por necesidades de reparación o reposición de colectores, añade. Los contenedores deberán disponer de un sistema anti-retorno, con una boca superior para el depósito giratoria o similar, y de un cierre de seguridad.

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