Un arqueólogo vigilará si en las obras aparecen restos de la capilla de Carral

Frente al Monumento dos Mártires de Carral se ubica la praza da Capela. A pesar de este nombre, en este pequeño espacio no existe ningún templo. Pero hasta los años sesenta o setenta estuvo la capela do Socorro, que algunos carraleses y carralesas aún recordarán, y existen bastantes posibilidades de que puedan quedar restos bajo tierra.

El Concello ha licitado la humanización de esta plaza (en 2009 anunció su ennoblecimiento y en 2011 su reforma), hacerla más cómoda para los peatones, más verde, y que resulte más acogedora, como debe ser una plaza de un pueblo, para congregar personas. Pero esta actuación también prevé un control arqueológico, la vigilancia diaria de los trabajos por si aparece algún elemento de aquella pequeña iglesia, testimonio de unos años en los que las vías alrededor eran simples caminos de tierra. Gracias a una fotografía aérea antigua (año 1956) se sabe la ubicación exacta del antiguo templo, que estaba entre la acera y donde se ubica el paso de peatones. Se conoce además que era un templo cuadrangular de ocho metros de largo y un pequeño campanario en la cubierta.

El estudio del arqueólogo Antón Malde es el encargado del proyecto de control y seguimiento de la obra, que cuenta con autorización de Patrimonio de la Xunta al ser un elemento protegido en las normas urbanísticas de 1993,a pesar de que no existe. Si aparecen restos relevantes serán documentados y se comunicará a la Xunta. Los expertos consideran que pueden aparecer restos de cimentación de un muro lateral, de la fachada y un pequeño tramo de la parte trasera de la capilla. “La catalogación debería de haber sido la de sitio arqueológico” , señala el arquitecto Malde respeto a la capilla.

El control es necesario porque las obras que ejecutará el Concello prevén demolición del suelo para poner todo al mismo nivel (vial y plaza), cambiar de sitio la marquesina y la parada de autobús y poner más zonas verdes.

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