La plantilla del Atlético Arteixo exige la dimisión de la junta directiva por la obra del campo Ponte dos Brozos

Los jugadores afirman sentirse "engañados" y acusan a la junta de "ocultar su verdadera postura" sobre la instalación de césped artificial

Los responsables de la gestión deportiva del Arteixo defienden que fue una "decisión meditada" por el "bien común" y "pensando en la viabilidad deportiva y económica del club"

El Concello adjudicó los trabajos por 895.000 euros a Jardinería Arce

Jugadores y cuerpo técnico del Arteixo protestan por la instalación de césped artificial en el Ponte dos Brozos

Jugadores y cuerpo técnico del Arteixo protestan por la instalación de césped artificial en el Ponte dos Brozos / L. O.

Los jugadores del primer equipo del Club Atlético Arteixo han emitido un comunicado en el que solicitan la dimisión de la junta directiva por su "cambio de postura" en lo relativo a la obra del campo Ponte dos Brozos, que pasará a tener césped artificial.

La plantilla denuncia que lo acordado inicialmente con el Concello de Arteixo era la renovación del campo natural y la creación de un tercer recinto de hierba artificial, una opción que, dicen, permitiría tener más espacio para la actividad de base y conservar el único cambio natural del municipio y uno de los pocos de la comarca. "No solo es un aliciente para los propios jugadores de base, sino para atraer a jugadores de nivel", inciden.

El equipo acusa a la actual directiva de mentir y "ocultar su verdadera postura". Afirma que los responsables de la gestión deportiva del club no manifestaron nunca su apoyo a la sustitución del campo y llegaron a culpar al Ayuntamiento. "En última instancia, nos dicen que el Concello no les dio alternativa y ya no tenían 'nada que hacer', pero la realidad es que dos días después de la suspensión de las obras son ellos los que solicitan el inicio de las mismas", critican en alusión al comunicado emitido por la junta directiva solo un día antes de que el Concello contratase los trabajos.

"Nos sentimos engañados por nuestro propio club, creyendo que velarán por nuestro bienestar, sin embargo, no solo nos perjudican, sino que no han sido ni claros ni transparentes", lamenta la plantilla, que afirma haber sido víctima de "presiones y amenazas" por anunciar protestas.

"Lo que nos da verdadera pena es que la reputación del club quede manchada para los años venideros por decisiones y, sobre todo, por actitudes irresponsables y poco profesionales por parte de la actual directiva", concluyen los jugadores, que dejan claro que seguirán "compitiendo y peleando para conseguir los objetivos deportivos del club".

Postura de la junta directiva

El comunicado del primer equipo del Arteixo, que milita en la 3ª RFEF y se encuentra actualmente en puestos que le permitirían disputar la promoción de ascenso, llega unos días después de que la junta directiva emitiese una nota de apoyo a la instalación de césped artificial "de última generación" por el “bien común” ante la “saturación del campo artificial” y “pensando en la viabilidad deportiva y económica del club”. Su pronunciamiento dista del trasladado a los jugadores días antes, en su último partido en el campo, cuando les anunciaron que las obras se suspendían.

“Sabemos que esta decisión puede herir ciertas sensibilidades y para nosotros no es una decisión fácil”, afirman desde la directiva, que subraya que es una “decisión meditada”: “Tenemos nuestras razones, las cuales creemos determinantes y que supondrán en un futuro una mejora como club en todas las categorías”, defienden en un comunicado que culmina con una disculpa “a todos los que no compartan esta decisión”.

Adjudicación de la obra

El Concello de Arteixo adjudicó el jueves la obra por 895.227 euros a Jardinería Arce. El pliego establece un plazo de ejecución de ocho meses. Los trabajos comenzarán tras la firma del acta de replanteo.

El Gobierno local, del PP, defiende que con esta decisión pretende satisfacer las necesidades de espacios deportivos de los niños y que puedan jugar todas las categorías, algo que con la hierba natural resulta inviable por su deterioro.