El mapa de la inseguridad en A Coruña: los delitos que castigan más a los barrios

La inseguridad movilizó esta semana a los vecinos. Una concentración de unas 200 personas manifestó el miércoles ante el antiguo Club Financiero, inmueble ocupado ilegalmente, su insistente demanda de mayor presencia policial en las calles por el aumento de delitos de los que son testigos en sus barrios. Los convocantes, representantes de las entidades vecinales de Elviña, Barrio de las Flores, Martinete, Sector 7-Someso, Matogrande, Novo Mesoiro y Orzán-Pescadería, también entregaron el viernes casi 5.000 firmas con la misma solicitud: el aumento de policías en los barrios. Los delitos registrados y denunciados se reparten por la ciudad, aunque el número es mayor en el distrito Sur que en el Norte —las dos partes en que policialmente se divide A Coruña, cada una con una comisaría—, con los robos a la fuerza en viviendas o locales, los robos en el interior de vehículos y las agresiones como principales tipologías delictivas.

Los datos proceden del balance de criminalidad publicado por el Ministerio del Interior y son de 2022, año en el que hubo una muy ligera subida global de la delincuencia denunciada en la ciudad (0,2%, un total de 12.899 casos). Según estadísticas a las que ha tenido acceso este diario, el distrito Sur fue escenario del 54,4% de los delitos, frente al 45,6% del Norte, las zonas más céntricas.

Coincide que la mayoría de los convocantes de la concentración del Club Financiero y promotores de la recogida de firmas para reclamar más presencia policial son vecinos del distrito Sur (con barrios como Os Mallos, Sagrada Familia, Monelos, Eirís, Falperra, Cuatro Caminos Os Castros, Elviña, Matogrande y Barrio de las Flores); en el Norte están, entre otros, Monte Alto, Ciudad Vieja, Orzán-Pescadería, Os Rosales, Agra y O Ventorrillo.

Los vecinos de Elviña: “¡Más robos no, fuera ocupación!”

Robos con fuerza. Una de las tipologías más acusadas en el distrito Sur (65,4%) que en el Norte (34,5%). El total de estos delitos en la ciudad rozó el medio millar en 2022. Al tratarse de asaltos en el interior de casas, locales comerciales u otros establecimientos, para los delincuentes es menos arriesgado actuar en zonas con menos movimiento de personas y vehículos y escasa iluminación en horario nocturno, que es cuando mayormente se cometen los delitos, que tienen como botín el dinero de cajas registradoras o máquinas tragaperras. Los asaltos a la fuerza en viviendas son obra de grupos organizados e itinerantes de delincuentes o de autores que viven en la ciudad que entran en residencias próximas a puntos donde existe tráfico habitual de estupefacientes, señalan fuentes policiales, con el fin de intercambiar objetos robados por droga.

Robos en coches. Romper el cristal de un vehículo o forzar la cerradura de una puerta para robar en su interior es más común en los barrios del distrito Sur (68%), donde hubo casi 800 casos, que en el centro de la ciudad (31,9%). Estos delitos se producen de noche, en zonas de aparcamientos amplios sin vigilancia y sin tránsito de personas, como explanadas próximas a las instalaciones sanitarias.

Agresiones y lesiones. Las estadísticas muestran que las agresiones o delitos contra las personas son más en el Sur (55,1%) que en el Norte (44,8%), mientras que los delitos de lesiones (más de medio millar, de los que 73 fueron graves) fueron mayores en el centro de la ciudad, ya que la mayoría suelen producirse en zonas de ocio nocturno y en horario de madrugada, con grupos de jóvenes o pandillas como protagonistas. Las agresiones son una tipología que admite variedad de delitos, como los producidos en el ámbito familiar, entre personas conocidas o por problemas de convivencia entre vecinos.

Robos con violencia e intimidación. Estas acciones también se dan más en el distrito Sur que en el Norte, aunque no es tanta la diferencia (51,2% frente a 48,7%). Las víctimas de estos delitos son principalmente personas mayores que apenas ofrecen resistencia a los delincuentes y que son abordadas en calles apartadas por las que transita poca gente y con iluminación insuficiente, apuntan las fuentes policiales consultadas.

Vecinos de siete barrios coruñeses reclaman seguridad con el apoyo de casi 5.000 firmas

Hurtos. Estos son los delitos más numerosos: más de 4.500 se denunciaron el año pasado, un 9% más que el anterior. Son ligeramente más frecuentes en los barrios más alejados del centro (51,7% frente a 48,2%). A los de una zona y otra los diferencia la hora del día en que se cometen: en la parte Norte ocurren casi todos de noche, sobre todo en locales de ocio, en donde a las víctimas les desaparece el teléfono móvil, carteras y bolsos; en el Sur se dan en centros comerciales o grandes superficies. Para la Policía Nacional es más fácil obtener pruebas de delitos en estos escenarios porque suele haber cámaras de vigilancia o agentes de seguridad, mientras que por la noche es más difícil investigar. Los hurtos se producen al descuido, con delincuentes atentos a objetos que quedan lejos de la atención de sus propietarios; la oscuridad en locales de ocio y el efecto del consumo de alcohol son factores que facilitan la acción de los infractores y despistan a las víctimas.

Presencia policial. Más policías en las calles. Esta es la reclamación que hacen vecinos de zonas alejadas del centro que denuncian el aumento de la inseguridad en sus barrios. La demanda la apoyan sindicatos policiales, que desde hace años denuncian la merma de efectivos en sus plantillas y la reducción de patrullas en las calles, tanto de día como de noche. Los sindicatos apuntan que las protestas se deben al aumento de delitos “leves” e indican que en A Coruña no se dan graves. Las reclamaciones vecinales serán recogidas por los grupos de la oposición para llevarlas al próximo pleno.

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