Condenado un yihadista que intentó adoctrinar por carta a un recluso de Teixeiro

El terrorista, que le escribía desde Mallorca, instaba al preso “dar su vida por Alá” a través del Corán

Instalaciones de la cárcel de Teixeiro, en el concello coruñés de Curtis.

Instalaciones de la cárcel de Teixeiro, en el concello coruñés de Curtis. / Víctor Echave

La Audiencia Nacional ha condenado a siete años y seis meses de cárcel a dos de los tres acusados de captación y adoctrinamiento terrorista por enviar cartas a otros internos de distintos centros penitenciarios de España con el objetivo de mantenerlos cohesionados en el ideario yihadista e incitarles a seguir con su actividad terrorista una vez quedasen en libertad. Entre uno de los receptores de esas misivas se encuentra un preso del centro penitenciario de Teixeiro, que recibió una carta por parte de uno de los condenados desde la cárcel de Mallorca.

Según recoge la sentencia del Ministerio Fiscal, “fue numerosa y abundante la correspondencia que el acusado mantuvo con internos vinculados al terrorismo yihadista y a quienes alentaba para que no abandonaran la lucha en favor del ideario yihadista durante su estancia en prisión, a fin de que continuaran con la yihadarmada una vez puestos en libertad”.

Así ocurrió con uno de los presos de Teixeiro, que recibió la carta el pasado 11 de julio de 2018, en la que en uno de los condenados le hacía saber su “malestar” por no recibir comunicación por su parte, a la vez le transmitía su “orgullo” porque sus más allegados estuviesen junto a él en ese “ camino tan duro” como es la cárcel y a la vez “tan placentero, por ser mensajero de Alá”. En la misiva, según la Audiencia Nacional, le insta a la “paciencia y firmeza y en su fe”.

En la carta se incluía un verso del Corán, con la que el preso de Mallorca, según interpreta la Audiencia Nacional, incidía en la idea de que “hay creyentes que ya han dado su vida por la causa de Alá y otros que esperan la oportunidad”.

Un tercero absuelto

Un tercer acusado en el caso, que finalmente resultó absuelto de los delitos de captación y adoctrinamiento terrorista de los que se acusaba, también se carteó con el preso de Teixeiro, a través de misivas en las que le aseguraba que le constaba que se había dejado “la barba larga”, a la vez que compartía con él la rutina que estaba llevando a cabo desde su prisión para memorizar el Corán.

Los dos condenados se cartearon entre los años 2014 y 2019 con reclusos de distintos centros penitenciarios mientras cumplían condena en prisiones españolas. Muchas de esas misivas no pasaron por el control de Instituciones Penitenciarias propio del régimen al que estaban sometidos en la cárcel. Los condenados trataron de cohesionar a los internos encarcelados por delitos relacionados por el yihadismo.