Baltar descarta dimitir y admite otras dos multas antes de ser cazado a 215 km/h

El escándalo protagonizado por José Manuel Baltar, interceptado el pasado domingo por la Guardia Civil cuando circulaba por la A-52 a 215 km/h cuando el límite es de 120, capitalizó el pleno de la Diputación de Ourense, institución que preside el también líder del PP provincial. La oposición lanzó una batería de preguntas sobre el caso —15 del PSdeG y otras 15 del BNG— y el político trató de dar carpetazo al asunto. Negó que tenga intención de dimitir y reiteró que se trató de un “error aislado”, aunque luego reconoció haber sido castigado con otras dos sanciones por exceso de velocidad.

Baltar restó importancia a esa cifra, pues aseguró que se trata de “tres sanciones en 11 años” —dos en Ourense y una en Zamora, la del pasado domingo— tras realizar “miles de kilómetros” en el coche oficial, el mismo vehículo que recibió otras seis sanciones. Cinco de ellas se las imputó a “chóferes de Presidencia” y otra no pudo ser atribuida por el personal de la institución. En todo caso, “fueron abonadas por el infractor”.

Sucedió lo mismo tras los hechos del pasado domingo. El dirigente del PP asumió “personalmente el error administrativo” y pagó de su bolsillo la sanción de 300 euros —la mitad del importe al acogerse al pronto pago—, que además incluye la retirada de seis puntos del carné.

Circular a esa velocidad, sin embargo, no constituye únicamente un incumplimiento “administrativo”, sino que puede constituir un delito contra la seguridad vial. De hecho, Baltar deberá comparecer la próxima semana ante el juzgado de Puebla de Sanabria y se arriesga a una pena de tres a seis meses de prisión, o o multa o trabajos sociales, así como la retirada del carné de uno a cuatro años.

En sus explicaciones, Baltar también negó haber cargado dietas a la institución provincia, si bien sí vinculó con su agenda pública el viaje en un vehículo de este organismo. Participó, dijo ayer, en reuniones de la Fundación de Democracia y Gobierno Local y en un acto de turismo como ponente de la agrupación de villas y localidades termales europeas.

Este asunto estalló a poco más de un mes de las elecciones municipales del 28 de mayo. El PP trata de rebajar su importancia. Aunque la cúpula estatal no ampara ese comportamiento, como aseguró el jueves Cuca Gamarra, secretaria nacional del partido, quiere cerrar el asunto. “Se han dado todas las explicaciones”, sostuvo ayer el coordinador general del PP, Elías Bendodo, que quiso ponerle punto y final. “Los políticos somos también un reflejo de la sociedad y también se cometen errores. Se pide disculpas y se sigue adelante”, zanjó, informa Efe.

Por su parte, el presidente de la Xunta y del PPdeG, Alfonso Rueda, descartó la apertura de un expediente a Baltar si es condenado, pues el código interno de su formación “probablemente no esté pensado en este tipo de actuaciones”, sino para delitos más graves.

La oposición, sin embargo, trata de forzar su salida o, al menos, su desgaste, algo que podría suceder “como con cualquier otra conducta inadecuada” tras su multa, como reconoció la número dos del PPdeG, Paula Prado.

La líder del BNG, Ana Pontón, avanzó que tratarán de lograr la “reprobación” de Baltar en el Parlamento, donde ya han registrado esta iniciativa, aunque no se votará antes del 28-M. La mayoría absoluta del PP garantiza su fracaso. Aun así, vinculó que el PP lo arrope a que Rueda “no puede” prescindir del barón. “Nos avergüenza, no queremos que sea la imagen de Galicia ni de Ourense”, resumió, informa Efe.

La diputada del PSdeG Patricia Otero exigió su cese o dimisión porque “una persona con su historial no puede estar al frente de una institución pública, ya que no da ningún ejemplo” y “pone en peligro” a los conductores al circular a 215 km/h.

Suscríbete para seguir leyendo