La Consellería de Economía, Empresa e Innovación ha informado desfavorablemente los proyectos de parques eólicos Caíño y Brancellao que promueve la división de energías renovables de Endesa, Enel Green Power, ante el Área de Industria y Energía de la Delegación del Gobierno en Galicia.
La jefa de servicio de Enerxías Renovables, Raquel Carballido, y la subdirectora xeral de Enerxía, Isabel Castro, han informado en contra de estos dos parques, que suman 58 aerogeneradores y que han disparado las alertas de los concellos afectados por su impacto.
Los informes autonómicos realizan varios observaciones a las actuaciones proyectadas:
- El Gobierno gallego concluye que el proyecto del parque eólico Brancellao incumple las disposiciones que establece el Plan Sectorial Eólico de Galicia y la ley por la que se regula el aprovechamiento eólico al emplazarse fuera de las áreas de desarrollo delimitadas. El departamento autonómico advierte además de que la poligonal de este parque, que ocuparía terrenos de Curtis, Oza-Cesuras, Vilasantar, Sobrado, Frades, Mesía, Boimorto y Ordes invade terrenos de la Rede Natura 2000. Como ya informó este diario, el parque Brancellao prevé 25 aerogeneradores con un diámetro de 170 metros y una altura de buje de 115 metros y con una potencia total de 140 megavatios; una subestación de 220 kilovatios con una línea de 22 kilómetros que conectaría con la planta de Mesón do Vento (Iberdrola).
- En el caso del parque eólico Caíño, la Xunta concluye que salvo en tres posiciones, el proyecto incumple las disposiciones del Plan Sectorial Eólico de Galicia al emplazarse fuera de las áreas de desarrollo establecidas. Este parque 187 megavatios y 33 molinos con una potencia unitaria de 5,7 megavatios. El proyecto de este parque incluye una subestación en Curtis de la que saldría una línea de alta tensión de 220 kilovatios y 9,74 kilómetros que discurriría por Curtis y Oza-Cesuras (9.580 aéreos) conectaría con la estación en proyecto de Seselle. De esta planta partiría una línea de 14,8 kilómetros (14,2 aéreos) que conectaría con la subestación de REE de Abegondo. El proyecto disparó las alertas en la comarca betanceira, con la constitución de una plataforma vecinal y el rechazo profundo de las corporaciones de Curtis, Vilasantar u Oza-Cesuras, que alertaron del impacto ambiental, paisajístico y en el sector primario. Partidos como el BNG anunciaron además la presentación de iniciativas ante el Congreso para exigir la retirada del proyecto.
La empresa promotora, Endesa, emitió recientemente un comunicado en el que destaca que las infraestructuras respetan las distancias legales, minimiza el impacto ambiental, garantiza la actividad ganadera, agrícola o forestal en la zona y apela a los cuantiosos ingresos que recibirían concellos como Curtis, donde prevé 36 de los 58 molinos.
Sin respuesta a las alegaciones de los parques de Monte do Gato
La Consellería de Economía ha emitido ya los informes sobre estos dos parques que salieron recientemente a exposición pública, pero aún no se ha pronunciado sobre los que afectan a Monte do Gato, que comenzaron a tramitar hace ya más de un año Galenergy y Greenalia ante la Xunta, que dieron pie a la constitución de varias plataformas vecinales y recibieron alegaciones de los concellos afectados y de la Reserva de Biosfera.
El BNG ha presentado otra iniciativa en el Parlamento para instar a la Xunta a proteger As Brañas do Deo, enclave incluido en la ampliación de la Red Natura que la Xunta dejó en un limbo y afectado por varios planes eólicos, incluidos los de Endesa.
Siete plataformas han convocado una reunión hoy a las 12.00 en la cooperativa Coba de Vales (ahora Aira), en Mesía, sobre los eólicos en la comarca.
