El Concello de A Coruña estudia “colaborar” con Sogama tras el pacto firmado de 2007 que no se llegó a ejecutar

El acuerdo recogía que la Xunta recibiese excedentes de Nostián

El Ejecutivo anunció que licitaría la gestión de la planta antes del 4 de enero, pero ahora habla de resolver alegaciones

Vista externa de la planta de tratamiento de residuos municipal de Nostián. |   // VÍCTOR ECHAVE

Vista externa de la planta de tratamiento de residuos municipal de Nostián. | // VÍCTOR ECHAVE / Enrique Carballo

El Ayuntamiento “mantiene la puerta abierta a una posible colaboración con Sogama”, la instalación de residuos de la Xunta, mientras prepara el concurso para la nueva concesión de la planta de basuras coruñesa, Nostián, que lleva en precario desde diciembre de 2019. Esta posibilidad, afirma el Concello, ya se estudió con el Gobierno gallego en la reunión del mes pasado entre la conselleira de Medio Ambiente y los ediles José Manuel Lage (Economía) y Noemí Díaz (Medio Ambiente y Gestión de Residuos), aunque el Gobierno local no ha querido aclarar qué medidas concretas se estudian. Entre las dos administraciones ya hay un convenio de colaboración de 2007 para gestionar recursos, aunque nunca se llegó a cumplir.

El acuerdo, firmado en verano de ese año por el alcalde Javier Losada y el conselleiro de Medio Ambiente Pachi Vázquez, ambos del PSOE, establecía que la planta de Sogama recibiría los excedentes de basuras que no pudiese reciclar Nostián, y que las instalaciones coruñesas, a cambio, fabricarían compost con residuos de la Xunta. En 2020-2021 la regidora Inés Rey y el expresidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, estudiaron la posibilidad de que Nostián se encargase del material orgánico y la planta autonómica del inorgánico, aunque las conversaciones tampoco fraguaron.

Lage y Díaz se reunieron este viernes con el Consorcio As Mariñas, que agrupa a los ayuntamientos de la comarca que llevan sus residuos a Nostián (Abegondo, Bergondo, Betanzos, Cambre, Carral, Culleredo, Oleiros y Sada), para preparar el concurso de la planta, un encuentro que se repetirá “en las próximas semanas”. El Consorcio no ha querido hacer declaraciones sobre la reunión, en la que, según fuentes consultadas, no se presentaron propuestas de calado.

La reunión se produjo casi un año después de que el Concello preparase un anteproyecto del concurso, que la Junta de Gobierno Local aprobó en diciembre de 2022. En el documento el Concello estimaba que el precio del tratamiento de residuos se duplicaría, hasta más de 128 euros por tonelada, y que añadiría un quinto contenedor para recoger envases ligeros, renunciando al modelo de Nostián, el húmedo-seco, algo que ya ha admitido que llevará a cabo por imposición, asegura, del Gobierno central. En su momento, el Consorcio protestó porque consideraba que no se le había incluido en la preparación del documento.

Años de retrasos

Este año se suma a la larga tramitación del nuevo contrato, objeto de múltiples retrasos. Marea Atlántica había preparado unos pliegos, pero el Gobierno local socialista (que llegó a intervenir Nostián en 2020 porque la concesionaria, Albada, se negaba a tratar los residuos del Consorcio) reinició el proceso para adaptar la documentación a los cambios legislativos, según afirmó. También defendió que sacaría el concurso durante el pasado mandato. El 25 de septiembre, en los 100 primeros días de su segundo mandato, la alcaldesa Inés Rey se comprometió a sacar el concurso en otro centenar de jornadas, una condición que fuentes municipales confirmaron a este diario. El plazo expira el 3 de enero, pero, tras la reunión con el consorcio, el Concello solo se compromete a “resolver antes de final de año las alegaciones al anteproyecto” e introducir “mejoras”.

El Consorcio aprobó subir un 35% el recibo de basuras por el impuesto de una nueva ley estatal y para paliar el déficit del servicio; el Concello no ha respondido a este diario si tomará una medida análoga.

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