“No queremos que la Sagrada Familia sea el vertedero de la ciudad”

Vecinos y comerciantes de la Sagrada Familia, en A Coruña, se han cansado de ver sus contenedores y aceras llenas de enseres voluminosos y han iniciado una campaña para acabar con este problema. Han pegado carteles para concienciar y pedir a los usuarios que tengan que dejar muebles u otros objetos de gran tamaño en la calle que llamen al 010 o utilicen los puntos limpios de la ciudad. Además, el presidente de la asociación de vecinos y comerciantes de este barrio, Juan Rodríguez, avanza que harán patrullas nocturnas para identificar a los infractores. “No queremos que la Sagrada Familia sea el vertedero de la ciudad”, proclama.

Rodríguez reconoce que este problema “viene de lejos”, pero los vecinos “se han cansado” y han decidido actuar. Los carteles azules que han repartido y pegado por el barrio mandan un mensaje claro: “¿Hartos de ver basura voluminosa en nuestras aceras? No seas igual. Llama al 010. Y tú que la dejas y no avisas: sabemos quién eres y te vamos a denunciar. Por un barrio limpio”.

El presidente de la entidad vecinal explica que “hay gente que viene en furgonetas desde otros barrios y echan la porquería aquí”. Por ello, organizarán patrullas nocturnas, con el fin de identificar a los infractores y avisar a la Policía Local. “No queremos basura. Queremos que la gente cumpla las normas de civismo y educación”, añade.

Rodríguez desvela que en la Sagrada Familia se encuentran “de todo” junto a los contenedores y les molesta que “voluminosos con clavos permanezcan durante semanas en la acera”. “Podemos hablar de cosas graves y no queremos eso”, indica.

Los responsables de esta campaña creen que este “problema se puede erradicar” y es lo que están intentando con la pegada de carteles. “Es un problema que se puede atajar. No queremos desviarlo a otro barrio porque eso sería una tontería. Vamos a luchar para erradicarlo y que se cumplan las normas de civismo, que es depositar los voluminosos en los puntos limpios o llamar al 010”, resume Juan Rodríguez, que es consciente de que se trata de una “campaña agresiva”, pero sabe que es la forma de ponerle solución.