Las goteras obligan a cerrar la sala de adultos de la biblioteca del Fórum Metropolitano

Los usuarios serán atendidos en el espacio infantil hasta que se solucionen las filtraciones

Acceso a la biblioteca del Fórum.   | // CARLOS PARDELLAS

Acceso a la biblioteca del Fórum. | // CARLOS PARDELLAS / Redacción

Redacción

Las goteras vuelven a pasar factura a la red de bibliotecas municipales. Esta vez a la del Fórum Metroplitano, que este martes informaba de que debía cerrar las instalaciones de la sala de adultos debido a las filtraciones. Los usuarios e usuarias serán atendidos en la sala infantil “hasta nuevo aviso”, cuando se solucione el problema de las filtraciones, que impiden el paso a los usuarios y entorpecen el funcionamiento de la biblioteca y el trabajo de los empleados.

No es la primera vez que el Fórum Metropolitano sufre de goteras, que se suman a una larga lista de filtraciones que han tenido lugar en las bibliotecas municipales en los últimos años. Las asociaciones de Os Rosales y Labañou denunciaron recientemente el “grave deterioro” de la biblioteca del barrio debido a las filtraciones de agua. Según señalaron, hay “goteras” y techos agujereados, con desprendimientos del pladur, humedades y muebles deteriorados. La biblioteca de adultos tuvo que cerrar el pasado mes de noviembre por peligro de que el techo cayese sobre los trabajadores. La asociación afirma que los problemas se deben a la falta de presupuesto para el mantenimiento de los edificios.

La memoria de gestión del servicio municipal de Bibliotecas de 2022, destaca la importancia de abordar obras de mantenimiento adecuadas de los edificios, instalaciones y equipamientos, tanto para prestar los servicios como para aumentar su vida útil, lo que comprende reformas estructurales como actuaciones puntuales y urgentes. Entre ellas, destacan como pendientes las filtraciones y goteras en la biblioteca de Os Rosales y en la del Fórum Metropolitano —que ya fue objeto de intervenciones que no solucionaron el problema en su totalidad—.

Como respuesta a la problemática, el Ejecutivo local presentó en la primera reunión de la comisión especial de bibliotecas el pasado mes de noviembre un documento en que admite la necesidad de reparar “deficiencias estructurales”.