Baloncesto - Liga 2

La última jornada condena a Maristas al descenso

No se cumplió ninguna de las dos premisas que necesitaba

Entrada a canasta de Stojanovska en el partido contra el Arxil.

Entrada a canasta de Stojanovska en el partido contra el Arxil. / Iago Lopez

RAC

El Maristas necesitaba una carambola en la última jornada y no se cumplió ninguna de las dos premisas que tenían que darse, por lo que se confirmó su descenso de la Liga 2 femenina. Ni el León perdió contra el colista Aridane (70-38) ni el Barakaldo pudo con el Unicaja Mijas (51-71). El triple empate a nueve victorias entre las coruñesas, las vascas y el Sevilla condenó al conjunto dirigido por Fernando Buendía.

Pendiente de lo que pueda pasar en verano en los despachos —alguna renuncia, tanto de los que se mantuvieron como de los que ascienden—, el equipo colegial, la referencia del baloncesto femenino en la ciudad, cede un sitio en la elite que se había ganado en la temporada 2018-19. En aquel momento la Liga 2 era la segunda categoría nacional. Las coruñesas perdieron el ascenso en la pista, pero fueron las mejor situadas por ranking para ocupar una vacante en verano.

En su primer año fueron penúltimas, con cinco victorias. Un paso atrás, pero en Primera Nacional demostraron su superioridad y volvieron a ascender. En la temporada 2020-21 ya evitaron el descenso con siete triunfos y dos equipos detrás en la clasificación. Para el curso siguiente hubo una reestructuración de las competiciones femeninas de baloncesto, que quedó con una primera categoría, la Liga Femenina y una intermedia, la Liga Challenge, entre esa y la Liga 2, que pasó a ser la tercera. Maristas quedó encuadrado en un grupo muy complicado, con muchos viajes. Cerró el año en la undécima posición (de 14) con diez victorias en 26 jornadas de liga.

Este curso consiguió nueve triunfos en dos jornadas menos, 24, por lo que fue por porcentaje su mejor año a pesar de todos los contratiempos que tuvo que sobrellevar el equipo a lo largo de la temporada, con continuas lesiones de sus jugadoras más importantes. Pero no le llegó para evitar la penúltima posición y vivir el descenso en la distancia y con las manos atadas ya que este fin de semana, el correspondiente a la última jornada, a las coruñesas les tocaba descansar.