Balonmano - Primera Nacional

El OAR, un aspirante sin temor

El entrenador del club coruñés, Marcos Rodríguez, celebra que la mayor virtud de la plantilla en esta primera vuelta haya sido “la aportación de todos los jugadores”

Mauro Jaureguiberry esquiva a un defensor del Carballal para buscar el lanzamiento.

Mauro Jaureguiberry esquiva a un defensor del Carballal para buscar el lanzamiento. / Arcay/Roller Agencia

Daniel Abelenda Lado

Daniel Abelenda Lado

“Ha sido una buena primera vuelta. No podemos decir que ha sido excelente por ciertos tropiezos que hemos tenido, sobre todo la última derrota en casa”, resume el entrenador del Attica 21 Hotels OAR, Marcos Rodríguez. A pesar de ese amargo trago ante el Granitos Ibéricos Carballal (26-30) en el último partido del año, y de la primera vuelta, nada empaña la notable actuación que el conjunto coruñés ha logrado cuajar en el inicio de una liga especial, la primera después del tráfico fallecimiento de Pablo Aguirregabiria el pasado mes de marzo.

“Nuestra mayor virtud es la aportación de todos los jugadores”, destaca Rodríguez. A pesar de en los resultados apenas se ha notado, el vestuario oarista sufrió mucho durante el último mes de competición con las lesiones y varios virus que afectaron a los jugadores. Desde el cuerpo técnico confirman que, debido a la profundidad de la plantilla, no hubo problemas para completar las convocatorias, pero sí que se vieron perjudicados en los entrenamientos. “Quizá recuperabas a jugadores para el fin de semana, con el handicap de que no haber podido trabajar”, cuenta el preparador coruñés.

El orgullo y el esfuerzo conjunto ha puesto al equipo del San Francisco Javier dentro una terna de favoritos que luchan cada semana por ostentar el liderato provisional del grupo 1 de Primera Nacional. “Estamos donde queríamos estar a nivel competitivo”, desvela Rodríguez. Han llegado al parón navideño segundos, a dos puntos del líder, el Landbit Lanzarote. Justo por detrás, también están inmersos la batalla por la cabeza de la tabla dos clubes de mucho nivel: el Reconquista de Vigo y el Teucro pontevedrés. Precisamente en la pista de este último llegó el triunfo más emblemático del OAR este curso, 30-31. Marcos Rodríguez se queda también con el rendimiento de sus jugadores en la primera parte ante el Lalín. “Poder dominar el partido en el marcador, el ritmo y la propuesta de juego, independientemente de quién sea el rival, es el camino a seguir”, señala el entrenador, convencido de que el OAR ha dispuesto de esos momentos brillantes sobre la pista.

Aunque el trabajo y la unión colectiva de todos los efectivos ha sido fundamental en la primera vuelta, dos nombres sobresalen en el apartado anotador: Diego Martínez y Mauro Jaureguiberry. “Son complementarios”, afirma Rodríguez. “Diego marca la diferencia en cuanto a su capacidad de lanzamiento”, elogia el técnico. Celebra que poco a poco haya recuperado confianza en su juego después de la complicada lesión de hombro que sufrió hace dos años.

Sobre Mauro, recién fichado este mismo verano, destaca que se ha adaptado muy rápido a al estilo de juego el equipo. “Nos aporta soluciones en ataque, el OAR no tenía a un lateral zurdo específico como él desde hace años”, sentencia.

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