Hockey sobre patines - OK Plata Masculina

Compañía de María, un ascenso con “ideales”

Vuelve a Plata apostando “en bloque” por la cantera

Mareque, Kiko García...

Los jugadores del Compañía de María celebran sobre la pista el ascenso a OK Plata. |  // IAGO LÓPEZ

Los jugadores del Compañía de María celebran sobre la pista el ascenso a OK Plata. | // IAGO LÓPEZ / Carlos MIranda

Carlos Miranda

Carlos Miranda

Compañía abandonó hace menos de un año la OK Plata y quiso que la penalidad, que su paso por bronce, sirviese para algo, que valiese no solo para volver porque sí, sino para lograrlo más apegado que nunca a su ADN. Entre el verano de 2023 y la primavera de 2024 han pasado muchas semanas de competición en las que el equipo coruñés ganaba casi por sistema y siempre lo hacía con una apuesta “en bloque” por la gente de la casa, jugando con júniors, según apunta su entrenador Alejandro Canosa. Solo una derrota y un empate en toda la liga, los dos a domicilio. El pasado fin de semana, tras vencer al Aurrera Bat-Gora (5-3), se convirtió de nuevo en equipo de Plata, donde acompañará a Dominicos. “Es un orgullo. Sabíamos que tarde o temprano íbamos a ascender, pero conseguirlo así... El equipo se ha manejado, además, con una madurez que no esperábamos para la media de edad que teníamos. Ahora parece que nos paseamos, pero hubo partidos en los que sufrimos y supimos sacarlos. No nos podemos quejar de cómo nos está saliendo todo y encima esta tranquilidad (la de ya estar ascendido) no se paga con dinero”, confiesa un técnico que ve como el club por abajo sigue ofreciendo talento, ya que los equipos alevines, infantiles y juveniles se han proclamado campeones gallegos y solo el júnior se tuvo que conformar con la segunda plaza.

Ha sido el ascenso de jóvenes valores como Mareque, Kiko o Dani Garea (de 2007 y 2008), pero también de Álex Pérez, Álvaro Trillo o Anxo Chouciño. También del argentino Liñan, quien ya lleva tres años “fuera de casa” y que esperan que sea uno de los importantes en el regreso a OK Plata tras los 34 goles de esta campaña (solo por detrás de Pelayo Aspra, del Oviedo Roller).

Compañía de María

Compañía de María / Iago López

La forma de lograr el ascenso ha trazado el camino para el futuro, pero sin obviar la realidad de la exigencia de la segunda categoría nacional. “Hay que reforzarse, es evidente, porque el salto cualitativo es importante”, razona antes de volver a lo que les ha traído hasta aquí y lo que defiende con fuerza y seguridad. “Hay que confiar en los chavales. Quizás no tan en bloque como este año, pero no debemos renunciar a nuestros ideales. Sería un error volvernos locos fichando o trayendo gente de fuera. Debemos mantenernos en formar jugadores, en sacarlos. Al ascenso, esta vez y la anterior, nos ha llevado la gente de casa y renunciar a todo eso...”, defiende quien explica cuál fue el planteamiento de esta temporada que ha finalizado con éxito. “Para nosotros descender tampoco fue un drama y apostamos por los chavales. Nos podía salir mal y tener que esperar un año más, pero han respondido”, razona.

A Compañía aún le quedan un par de partidos en este mes de mayo para decir adiós a la OK Bronce, dos duelos intrascendentes que servirán también a los más jóvenes para prepararse para los sectoriales de la cantera y las fases nacionales. Poco a poco también va poniendo sobre la pista psicológicamente a sus jugadores, algunos muy jóvenes, ante lo que se encontrarán en la categoría superior. Para él hay un cambio básico que le enseñó haber pasado por ella. “Hay diferencia (con Bronce). Se nota sobre todo en los partidos de fuera de casa, son muy disputados, están los viajes que cansan... Es otro mundo. Es una competición muy pareja, del primero al último, y cualquiera puede ganar o te puede ganar”, cuenta quien ya piensa en los nuevos retos que le esperarán a Compañía en unos meses. Los afrontará, ante todo, con su gente y apegado a su ADN.