La gestora de la piscina acusa al Ejecutivo de Sada de actuar en contra del interés general

La concesionaria ve injustificada la orden de cese, acusa al Gobierno local de repercutirle indebidamente gastos y avisa de que no tolerará “falsas acusaciones”

Redacción

Un día después de que el Concello de Sada ordenase el cese y desalojo de la concesionaria de la piscina, la empresa ha emitido un comunicado para explicar su postura a los usuarios en el que dedica duros reproches al Ejecutivo municipal, al que acusa de tomar una decisión que perjudica a la ciudadanía y pretender repercutirle indebidamente gastos derivados del arreglo de desperfectos ocasionados por las obras de reparación de la cubierta.

“En estos 19 años hemos interactuado con todos los partidos políticos, de todos los colores e ideologías. La llegada de este grupo de gobierno ha generado mucha incertidumbre, no han dado respuesta a ninguno de nuestros escritos de manera formal. Han tenido tiempo suficiente para reparar los desperfectos que son de vital importancia para la reapertura de la piscina, pero han tardado solo 24 horas en tomar una decisión que a nuestro parecer no beneficia el interés general”, afirma Hebe Sport en un comunicado en el que afirma que estos 813 días que ha permanecido cerrada la piscina por los desperfectos en la cubierta “solo han generado trabajo, disgustos por el arraigo la villa de Sada y deudas económicas que tardarán años en solventarse”.

La empresa insiste en que advirtió al Concello de la necesidad de reparar ciertos desperfectos antes de reabrir el complejo y denuncia que el Ejecutivo municipal pretenda ahora repercutirle, entre otros gastos, los derivados de la manipulación de los paneles solares durante las obras de la cubierta. “De los 103 paneles que estaban instalados, solo funcionan 26 y se han colocado de tal manera que se dan sombra unos con otros en ciertos horarios”, afirma. La empresa apela también a daños por corrosión en maquinaria y motores, a la acumulación de agua caliente inutilizada por fugas y a deterioros varios derivados del prolongado cierre. “Nuestra intención era salvaguardar todos aquellos bienes de los que hemos sido responsables durante estos años”, defiende.

El Concello alega que tomó la decisión de ordenar el cese tras realizar dos requerimientos a la gestora para que reabriese la piscina. El edil de Deportes, Breogán Blanco, afirma que el complejo está listo para la reapertura y avanza que el Concello tomará las riendas hasta que se adjudique un nuevo contrato.

Todo apunta a que el conflicto acabará en los juzgados. La concesionaria advierte de que no tolerará “falsas acusaciones” y que defenderá siempre su trabajo e intereses.