Estas son las obras de este año de la intermodal de A Coruña

Los trabajos se centran en mover tres de las vías, y este año se iniciarán nuevos andenes

Trabajos de la estación intermodal, junto a las vías de tren existentes, esta semana.   | // CASTELEIRO/ROLLER AGENCIA

Trabajos de la estación intermodal, junto a las vías de tren existentes, esta semana. | // CASTELEIRO/ROLLER AGENCIA / Enrique Carballo

La obra de la futura estación intermodal, fruto de una larga tramitación con un retraso de años, comenzó el pasado septiembre. Con un plazo de ejecución de 42 meses, los trabajos, según el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), encargado de la remodelación, avanzan “según el plan previsto”, sin que “se vean afectadas por coyunturas externas” como el encarecimiento de los materiales y la falta de mano de obra. Cuenta con terminarlas en 2026, aunque la compañía no aclara qué mes. Este año se espera avanzar en algunos de los nuevos andenes para trenes.

Hasta ahora, según fuentes de la empresa pública, los trabajadores han demolido algunas instalaciones de la actual estación de San Cristóbal y levantado las vías 22, 20, 18, 12 y 10, además de acondicionar la plataforma ferroviaria. También se ha realizado la obra civil, y las canalizaciones y las arquetas, en las que se situarán las “nuevas instalaciones de señalización y comunicaciones”, además de completar los trabajos previos para instalarlas.

Actualmente, según explica Adif, los obreros están trabajando en dos de las vías, la 3A y la 4A, para realizar lo que en el lenguaje técnico se conoce como “ripiado”, es decir, moverlas lateralmente. Esto es necesario, explican fuentes de la empresa, para “ejecutar el andén técnico previsto entre estas vías”. También se está levantando la vía 2A para iniciar los trabajos de otro andén, que, en la nueva estación, se designará como primero. Estos días se están realizando también obras para poner en marcha esta plataforma, como los drenajes.

Los trabajadores de la intermodal están ocupándose actualmente de los trabajos iniciales para un futuro paso inferior, que dará acceso al nuevo aparcamiento: en concreto, se están dando los primeros pasos para la excavación. Aparte de la continuación de las demoliciones de partes de la actual estación de trenes que no se aprovecharán, ya se están instalando algunas de las señales de la estación.

De aquí a final de año, Adif pretende ejecutar “parte del nuevo andén 1”, montando las nuevas vías y la catenaria. También se colocarán dos nuevos andenes, uno entre las vías 3A y 4A, y otro entre las vías 6A y 7A. Su propósito es favorecer “los estacionamientos de maquinaria durante las obras”. Además, se seguirán los trabajos de señalización para “la puesta en servicio el próximo año del nuevo enclavamiento de la estación”. En cuanto a la futura pasarela peatonal y ciclista, que sobrevolará las vías en la futura infraestructura intermodal, todavía tardará: fuentes de Adif señalan que “está en fase de redacción de proyecto”.

Más de 150 obreros al tiempo

Las obras se adjudicaron a Ferrovial por algo más de 72,5 millones de euros, e incluyen alejar las vías unos 85 metros del actual edificio. De acuerdo con Adif, se esperan picos de actividad en los que operarán “más de 150 trabajadores” simultáneamente. Se construirá una nueva área de embarque y una marquesina, y en la parte en la que las vías se han retirado se incorporará un gran vestíbulo de unos 3.250 metros cuadrados, con un módulo comercial. También se remodelarán los laterales y se añadirán 18 nuevos locales comerciales.

La empresa pública explica que las obras “conllevan una compleja planificación debido al gran número de instalaciones y servicios afectados”, y muchas se tienen que realizar en horario nocturno para no interrumpir el tránsito. Entre los trabajos de “más complejidad”, afirma Adif, están la nueva marquesina metálica que cubrirá parte de la estación, con “200 metros de longitud”, y el nuevo edificio de embarque.

La empresa, que promete que la reforma respetará el edificio histórico y mejorará tanto su eficiencia energética y su integración urbana como la “experiencia del viajero”, propuso en mayo al Ayuntamiento, que colabora en el proyecto junto con la Xunta, aumentar en 237 las plazas del aparcamiento subterráneo. Se ofreció a pagar el sobrecoste si el Concello reduce el tiempo durante el que se ocupará de la explotación del estacionamiento, ahora establecido en 20 años.

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