Carlos Arévalo y el K4 se reactivan en París

El K4 500, formado por el betanceiro Carlos Arévalo y por Saúl Craviotto, Marcus Cooper y Rodrigo Germade, séptimo en los Mundiales de Duisburgo, se tomó el desquite en la prueba de la Copa del Mundo que sirve de prueba para los Juegos de París 2024 al colgarse la plata. Los subcampeones olímpicos pasaron a la final en Vaires-Sur-Marne con la tercera plaza de la semifinal, en la que no salió la embarcación alemana, campeona en Tokio y mundial hace unos días. Tenían el pase asegurado y no forzaron. En la final acabaron segundos con 1:21.41, a tan solo 0.25 de los ganadores, los húngaros Bence Nads, Kolos Csizmadia, Istvan Kuli y Sandor Totka, subcampeones en Duisburgo. Completó el podio Dinamarca. El enclave será en el que en meses se jueguen las medallas de París 2024 y Arévalo quedó encantado con la experiencia, a pesar de sus peculiaridades. “Nos ha encantado. Es un lago muy abierto y permite entrar viento, cosa mala, pero el agua y el entorno nos ha convencido”, escribió en Instagram.

El K4 500 femenino de Sara Ouzande, Estefanía Fernández, Carolina García y Teresa Portela, bronce en Duisburgo, no pudo subir al podio. Pasaron a la final como terceras de su serie y en la regata definitiva fueron sextas con 1:37.53, a tres segundos del podio que cerró Alemania tras China y Nueva Zelanda.

Las oceánicas vencieron por tan solo una centésima. Tampoco pudieron repetir las subcampeonas del mundo de C2 500, Antía Jácome y María Corbera, séptimas en la final. Ganaron las chinas Shixiao Xu y Mengya Sun, las únicas que pudieron con las españolas en Duisburgo.