El Club Halterofilia Coruña, una fuerza que mueve medallas

Las 17 medallas que los deportistas del Club Halterofilia Coruña consiguieron el pasado fin de semana en el Campeonato de España sub 17 de selecciones autonómicas fueron el broche de oro a una temporada histórica esta disciplina en clave coruñesa. Los éxitos en prácticamente cada competición a la que han acudido halterófilos locales es tal que el entrenador del club, Ferenc Szabó, tiene dificultades para precisar el número de preseas obtenidas en 2023. “No sé decir cuantas, pero en todos los campeonatos de equipo e individuales hemos conseguido muchas medallas”, indica Szabó.

El veterano preparador de origen húngaro se enorgullece de lo que han aportado sus chicos y chicas a la selección gallega en la última competición del año. Daniel Rey sumó tres oros (arrancada, dos tiempos y total olímpico) en la categoría de 102 kilos. Mismo premio consiguió Paula Canedo en 81 kilos de peso. Johana Osayande recogió tres preseas de plata en más de 81 kilos. Darío Barros logró una plata y un bronce en 67 kilos y Daniel García se llevó tres bronces en 81 kilos. Además de esta gran colecta de metales, la actuación que más destacó en el club coruñés fue la de la prometedora Digna Silo. La joven competidora del CH Coruña logró imponerse en con tres oros en su categoría de peso, 76 kilos, y lo hizo, además, al establecer un total de seis récords de España sub 15: 75 kilos en arrancada, 95 en dos tiempos y 170 en total olímpico.

Estos éxitos son solo los últimos de una lista larga en este 2023. En noviembre, el club se impuso en las copas del Rey y de la Reina con sus dos equipos, masculino y femenino, por tercer año consecutivo. “Ningún otro club de España ha conseguido encadenarlos durante tres años”, apunta Ferenc Szabó, contento también por haberse impuesto en cinco de los seis campeonatos de clubes de ámbito nacional y haber acabado en el podio en el sexto.

Todos estos grandes resultados llenan de orgullo a Ferenc Szabó, que incide en el trabajo día a día como el único camino para alcanzar los éxitos que inundan al club coruñés. “Ahora es más fácil motivar a los chicos”, comenta Szabó, que compara las circunstancias actuales con las que se encontró al llegar a la ciudad, cuando “el nivel era un poco precario”. Celebra que las metas superadas en diferentes grupos de edad sirven para motivar a los competidores más jóvenes y a los novatos que ingresan cada año.

“El trabajo del entrenador es influir al chico para que se ponga objetivos reales, a corto plazo, y otros a medio y largo que sean alcanzables”, enuncia Ferenc Szabó. Lo primero que hace es plantearles a sus alumnos la realidad a que se enfrentan. “No le puedes decir a un chaval de catorce años que va a ir a los Juegos Olímpicos. Primero tiene que clasificarse para el campeonato de Galicia, el siguiente paso es el de España y, luego, hacerlo otra vez cuando cambia de categoría” detalla. Cree firmemente que esta filosofía de trabajo es la que ha permitido al club crecer y ganarse un nombre en la ciudad. “Actualmente trabajamos con más de 100 deportistas. A lo largo de los años, ha pasado tanta gente por aquí que casi todo el mundo en la ciudad tiene un amigo o un familiar que ha entrenado con nosotros”, asevera.

A pesar del reconocimiento creciente, más con los triunfos internacionales de figuras como Irene Martínez o Ruth Fuentefría, Szabó todavía tiene que hacer pedagogía con padres reticentes a que sus hijos se adentren en este deporte. Los miedos que le plantean son el crecimiento de los niños y las posibles lesiones vertebrales. “Hay gente pequeña en halterofilia porque hay categorías por peso corporal”, explica. Añade que “uno no es pequeño porque hace halterofilia, sino que hace halterofilia porque es pequeño”. Sobre las posibles lesiones, apunta que en los entrenamientos y competiciones se fortalecen los músculos de las piernas y la espalda para mantener “una posición recta y sana de la columna vertebral”.

Bajo la premisa de la salud de los deportistas y la confianza de las familias en el trabajo que se hace en las instalaciones del club en la Casa del Agua, Szabó encara el 2024 con el objetivo de igualar el nivel competitivo: “Este año hubo siete deportistas del club en campeonatos de Europa o del Mundo y, el año que viene, queremos mantenerlo”.